Es muy probable que cuando los médicos aborden el tema del marketing se identifiques aspectos relacionados con la promoción del consultorio por medio de los espacios y las plataformas que imperan con mayor vehemencia en nuestro entorno cotidiano. Internet, smartphones, activaciones (en el espacio público), etc.

La realidad es que, si bien el marketing es fundamental para dar a conocer tu consulta general y/o de especialidades, su uso lleva consigo los mismos postulados de ética, profesionalismo, excelencia y calidad en el servicio que se promueven desde la carrera. Pero, ¿cómo impulsar una estrategia de marketing con responsabilidad?

Marketing para la atención de tus pacientes

Con esto en mente, el equipo editorial de Saludiario ha preparado una serie de recomendaciones para que los profesionales de la salud tomen en cuenta al momento de considerar el uso del marketing como herramienta para la promoción de los servicios del médico, su imagen corporativa y las instalaciones donde se brinda la consulta general y/o de especialidades.

El marketing también tiene implicaciones éticas

• Para el caso de los profesionales de la medicina, en el sector salud, las estrategias de marketing no se pueden tomar a la ligera. Este tipo específico de marketing debe ser veraz y preciso. Un anuncio no puede excluir hechos que puedan influir en el proceso de toma de decisiones del paciente.  

Máxima privacidad con el paciente

• Cuando se habla de marketing en el sector salud, se debe de considerar la relación médico-paciente que conduce la práctica médica. Por ello, debe de imperar el máximo principio de privacidad para salvaguardar la integridad física y moral de tus pacientes. Los médicos no deben revelar información del paciente en sus anuncios.

Cuidado en el impulso de promociones

• En alusión al punto número de este pequeño artículo, el marketing aplicado al sector salud debe de considerar la mesura en el momento que se establecen “promociones”. Existen limitaciones sobre cómo y cuándo se pueden publicitar los servicios gratuitos o con descuento. Por ejemplo, algunos estados regulan la cantidad de tiempo que debe pasar antes de que un médico pueda cobrar por los servicios después de una consulta o servicio gratuito.  

Contacto con los pacientes

• La publicidad que implica el contacto directo con los pacientes es particularmente riesgosa. Muchas legislaciones limitan o prohíben el uso de solicitudes en persona o por teléfono. “El objetivo es proteger a los pacientes potenciales de una influencia, presión o intimidación indebidas” (MMN, 2018).

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