Como bien sabes, el actuar de los médicos está regido por una ética médica la cual establece cuáles son los comportamientos y conductas más valiosas y respetables de esta profesión.
De esta forma, cada país en el mundo posee sus propias normativas médicas, pero también existe el Código Internacional de Ética Médica, un documento que establece las bases para el comportamiento (deberes y obligaciones) de los profesionales de la salud en todo el mundo.
Este código es una de las reglamentaciones clínicas más importantes que todo médico debe conocer y llevar a cabo en el ejercicio de su práctica diaria, pues se trata de un documento avalado por la Asociación Médica Mundial.
Te invitamos a repasar los principales fundamentos para que obtengas un sentido general del Código Internacional de Ética Médica:
Deberes generales de los médicos
- Aplicar su opinión profesional independiente y mantener el más alto nivel de conducta profesional.
- Respetar el derecho del paciente a aceptar o rechazar un tratamiento.
- Proporcionar un servicio médico competente, con plena independencia profesional y moral, con compasión y respeto por la dignidad humana.
- Tratar con honestidad a pacientes y colegas, e informar a las autoridades correspondientes sobre los médicos que practiquen en forma antiética e incompetente, o a los que incurran en fraude o engaño.
- Ser respetuoso de los derechos y preferencias de los pacientes, de los colegas y de otros profesionales de la salud.
Deberes de los médicos hacia los pacientes
- Recordar respetar la vida humana.
- Proporcionar lo mejor para el paciente cuando ofrezca atención médica.
- Respetar el derecho del paciente a la confidencialidad.
- Brindar atención de urgencia como deber humanitario, a menos que esté seguro que otros médicos pueden y quieren prestar dicha atención.
Deberes de los médicos hacia otros colegas
- Comportarse hacia sus colegas como él desearía que ellos se comportasen con él.
- Respetar la relación médico-paciente de otros colegas.
- Cuando sea necesario, comunicarse con los colegas que atienden al mismo paciente. Esta comunicación debe respetar la confidencialidad del paciente y limitarse a la información necesaria.