Un nuevo estudio de JAMA titulado; Posibles escenarios finales de COVID-19
¿Erradicación, Eliminación, Convivencia o Conflagración? Nos da una nueva perspectiva acerca del futuro que nos espera con la pandemia.
4 escenarios potenciales para el COVID-19; erradicación, eliminación, cohabitación y conflagración
Según los expertos, dado que la volatilidad ha sido hasta ahora el atributo invariante del SARS-CoV-2, imaginar un estado estable futuro puede ser intrínsecamente problemático.
Este Punto de Vista describe 4 escenarios potenciales; erradicación, eliminación, cohabitación y conflagración. Los cuales comprenden un espectro de “finales” que pueden constituir la resolución de la pandemia de COVID-19; sin embargo, también pueden ser posibles otros escenarios.
ERRADICACIÓN
¿Qué se necesitaría para erradicar el SARS-CoV-2?
Por definición, la erradicación requeriría la reducción mundial permanente a cero de la prevalencia de la enfermedad mediada por el SARS-CoV-2. Para lograr tal resultado, debería lograrse una inmunidad colectiva suficiente mediante la vacunación y la infección previa. Tanto la inmunidad derivada de la vacuna como la de la infección tendría que ser muy eficaz, duradera, capaz de prevenir la transmisión secundaria. Y la reinfección, y protectora contra todo tipo de variantes virales presentes y futuras.
Dados estos requisitos relativamente astringentes, la erradicación puede resultar un objetivo demasiado ambicioso incluso como un experimento mental, y mucho menos como una estrategia de salud pública.
ELIMINACIÓN
La eliminación puede constituir un objetivo a corto plazo más realista para el SARS-CoV-2, especialmente si las vacunas de refuerzo de distribución lenta se vuelven necesarias para atacar las variantes virales emergentes. La evidencia de la eliminación exitosa del SARS-CoV-2 se está acumulando rápidamente.
La eliminación puede estar cerca en https://www.saludiario.com/wp-content/uploads/2015/12/8f6d71a5-bigstock-human-brain-and-computer-chip-39563953-1-e1464383720513.jpg. Se podrían lograr éxitos similares en otras naciones en las que se hayan logrado tasas de vacunación suficientemente altas. La eliminación temporal del SARS-CoV-2 sin la llegada de las vacunas puede resultar factible, como lo demostró Nueva Zelanda a principios de agosto de 2020.
Si se lograra la erradicación o eliminación, se requeriría la vacunación continua contra el SARS-CoV-2 y sus variantes para contrarrestar el riesgo continuo de una presunta transferencia zoonótica de murciélagos, visones de granja o animales aún por descubrir embalses.
CONVIVENCIA
Alternativamente, ¿podría lograrse una convivencia más civil con el SARS-CoV-2, un resultado que no sea la erradicación total o la eliminación sustancial? En este escenario, la protección mediada por vacunas llegaría tan lejos como para prevenir las manifestaciones más graves de COVID-19, interrumpir la cadena de transmisión viral y contrarrestar la mayoría de las variantes virales emergentes.
Es probable que la evidencia en apoyo de la realización de tal escenario incluya, pero no se limite a, la documentación de reinfecciones escasas, avances de vacunas raras y transmisión secundaria insignificante incluso frente a la mayoría de las variantes virales
CONFALGRACIÓN
En ausencia de una opción de convivencia, el final puede muy bien llegar a parecerse a una conflagración, es decir, un estado estable caracterizado por una endemicidad de nivel moderado de SARS-CoV-2. Con grandes segmentos de la población subvacunados debido a restricciones de acceso, vacilaciones o estados inmunodeprimidos, la circulación del SARS-CoV-2 está destinada a permanecer robusta.
El grado de conflagración puede llegar a depender sustancialmente de la eficacia y aceptación de las vacunas por geografía. Se han observado posibles brechas de cobertura contra variantes específicas para varias vacunas. La utilidad de la vacuna AstraZeneca contra la variante B.1.351 es un ejemplo de ello.
Pueden existir brechas similares en la cobertura de variantes preocupantes para otras vacunas para las cuales los datos disponibles públicamente hasta ahora han estado ausentes, escasos o limitados a estudios in vitro.
Suponiendo un estado de conflagración, con gran parte del mundo sujeto a una disponibilidad limitada de vacunas o de vacunas menos eficaces, es de esperar que se produzcan brotes en curso a mayor escala.
Notas relacionadas:
Médico investigado por recetar antiparasitario contra el COVID-19
¿Deberían perder sus licencias los médicos que difunden información falsa de COVID?
¿Qué se puede esperar con una tercera dosis de vacuna COVID-19?
¡No todo es COVID! tratamiento contra la malaria demostró ser 100% efectivo en ensayo…