Con la intensión de mejorar la calidad de vida de los pacientes y brindarle mayores herramientas a los médicos para la realización de su trabajo, el Colegio Americano de Cardiología (ACC), la Asociación Americana del Corazón (AHA) y la Sociedad de Ritmo Cardíaco (CRS) presentaron una actualización a la guía recomendada para la evaluación y el tratamiento de pacientes con bradicardia y trastornos de la conducción cardíaca.
De esta manera, dentro de las nuevas recomendaciones de la guía se incluye la selección y el calendario de las herramientas de pruebas de diagnóstico en los pacientes, incluidos los dispositivos de monitorización y las pruebas electrofisiológicas empleadas por el médico a cargo, además de otras opciones de tratamiento disponibles como intervenciones de estilo de vida, farmacoterapia y dispositivos externos e implantados.
De igual forma, la actualización incluye recomendaciones sobre la vigilancia posterior al procedimiento y la implantación de marcapasos. Otro punto a considerar es que también se incluyen las distintas formas de abordar la interrupción de la terapia con marcapasos y las consideraciones sobre el final de la vida útil.
Se debe remitir a los pacientes a material de confianza para ayudarles a comprender y conocer las consecuencias y riesgos de cualquier acción propuesta. Independientemente de la tecnología, en un futuro previsible, la terapia de estimulación requiere la implantación de un dispositivo médico y los estudios futuros deben centrarse en las implicaciones a largo plazo asociadas con la terapia de por vida.
Finalmente, si te interesa conocer la nueva guía con las directrices, puedes hacerlo en el siguiente enlace.