Si algo ha prometido Andrés Manuel López Obrador es combatir la corrupción. En reiteradas ocasiones ha mencionado que es el mayor problema de nuestro país al impedir un crecimiento real. De igual forma, ha expresado que no tolerará actos de este tipo dentro de su gabinete. Aunque en el pasado ha denunciado algunos casos, jamás se había presentado una denuncia formal dentro del sector salud.
Lo que comentó en días pasados es que se tenía conocimiento de al menos 50 casos ocurridos durante el pasado sexenio. Ahora eso cambió con la denuncia contra Antonio Cruces Mada, ex titular de la Secretaría de Salud de Jalisco (SSJ). Se le acusa del presunto desvío de 605 millones 635 mil 208 pesos. Aunque se estima que el daño dentro del sector salud podría ascender a 8 mil millones de pesos.
Dentro de las principales irregularidades se encuentran contratos y nombramientos alterados. También se le acusa de compras mal planeadas que provocaron miles de medicamentos caducados, además de obras irregulares.
Por su parte, Enrique Alfaro Ramírez, actual gobernador de Jalisco, fue claro al afirmar que se investigará a fondo el caso.
Es claro que se trata de un caso que debe terminar en la cárcel. Yo quiero verlo, me encantaría, que cualquier funcionario que hizo lo que él hizo pague con cárcel.
Por lo pronto, es el primer caso específico de presunto acto de corrupción en el sector salud que se delata en la Cuarta Transformación. Ahora lo que se pide es continuar con las investigaciones y dar a conocer los nombres de los demás funcionarios implicados en situaciones similares.