En la última sesión legislativa del periodo de sesiones, que duró mas de seis horas, con 34 votos a favor, nueve en contra y una abstención, el Congreso de Veracruz aprobó la Ley Antiaborto, con lo cual, la nueva reforma que el gobernador Javier Duarte presentó ante el Congreso estatal, castigará a aquellas mujeres que cometan aborto en dicha entidad.

“Felicito a las diputadas y a los diputados por decirle SÍ a la vida”, tuiteó el mandatario veracruzano tras la aprobación de la reforma.   

Cabe destacar que durante la sesión, la diputada del Partido Verde, Mónica Robles Barajas, dio a conocer que Veracruz es el quinto estado a nivel nacional en realizar abortos clandestinos y el cuarto en mortalidad post aborto.

En cambio, la ONG internacional Ipas, expresó su desaprobación ante dicha ley, al mencionar que penalizar el aborto no evitará que se siga practicando.

Mientras se desarrollaba la sesión legislativa, al Congreso arribaron una gran cantidad de organizaciones en favor de la vida, así como grupos religiosos y colectivos feministas quienes gritaron consignas en contra de la Ley Antiaborto. Por esto hecho, la presidenta de la Mesa Directiva, Octavia Ortega Arteaga, pidió respetar las intervenciones de los legisladores de las diferentes bancadas.

“La iniciativa busca resguardar el más fundamental d los derechos del hombre, que es el derecho a la vida”, se lee en el informe presentado por Javier Duarte en enero, quien equipara la interrupción del embarazo con la “pena de muerte”.

La diputada Mónica Robles dijo que no se debía aprobar a la ligera una iniciativa de estas dimensiones y tan controversial a nivel internacional, por lo que fueron muy cuidadosos al escuchar la opinión de todas las personas involucradas. Por su parte, el panista Hugo Fernández Bernal en su turno en el pleno, afirmó que defendía la vida y aunque “no tengo útero, provengo de uno”.

Finalmente, la Red de Mujeres por el Derecho a Decidir y el Colectivo Feminista de Xalapa, advirtieron que solicitarán a la próxima legislatura promover una acción de inconstitucionalidad para echar abajo la reforma. “Hay suficientes elementos legales para no dejar pasar esta ley, porque la modificación es violatoria de los derechos humanos de las mujeres y criminaliza a las que se realicen un aborto”, declaró Monserrat Díaz, del Colectivo Feminista de Xalapa.

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