Como lo sabes, el ser un profesional de la salud implica muchas satisfacciones, pero también muchos sacrificios. Mientras que Año Nuevo puede ser una festividad y el pretexto perfecto para descansar y salir de vacaciones para la mayoría de la población, para otros es todo lo contrario.
Con el objetivo de estar alertar ante cualquier problema, los médicos y enfermeras deben realizar guardias para nunca dejar abandonadas las instalaciones de salud. Esto implica tener que finalizar e iniciar cada año en el hospital. Abandonar a los seres queridos para estar al tanto de problemas que puedan presentar las personas es uno de los mayores sacrificios que realizan los profesionales de la salud.
Si bien, durante esta época del año disminuye el trabajo en la mayoría de los hospitales, también es una realidad que algunos problemas se repiten con frecuencia. Al respecto, el más recurrente es tener que atender a personas que llegan con congestiones alcohólicas por el abuso durante las celebraciones.
Esto resulta bastante grave porque es una situación que no se ha logrado combatir y en algunos casos puede provocar consecuencia mortales. Lo más lamentable es que se trata de un problema que se puede prevenir mediante una ingesta moderada de alcohol durante las fiesta de fin de año.
Por su parte, las campañas informativas que se han hecho hasta el momento resultan insuficientes porque de lo contrario no existirían este tipo de hospitalizaciones.