Tal y como detallan en el periódico La Vanguardia, el síndrome de Asperger es un “trastorno el neurodesarrollo que se engloba dentro de los trastornos del espectro autista (TEA)”. Algunos lo definen como una forma de autismo de alta funcionalidad y suele diagnosticarse entre los 4 y los 11 años.
Si en algún momento te toca tratar a un paciente de Asperger, como profesional de la Medicina, te interesa conocer la forma en la que hablarle o proporcionarle atención a estos pacientes. Desde la web de Autismo Diario, establecen algunos consejos para ofrecerle el mejor trato a este tipo de pacientes.
Valoran la soledad
Es una de las características de este tipo de pacientes y es que necesitan sus momentos de soledad y de hundirse en sus pensamientos. Así que cuando hay alguna situación que les genere ansiedad, mucho más necesitan esos momentos de conexión interna.
Necesitan literalidad
A un paciente con Asperger no debes nunca hablarle de forma indirecta ni darle solo una parte de la información de lo que piensas ya que una persona con Asperger no va a deducir el resto. Es decir, siempre debes expresar tus deseos y pensamientos de forma directa.
Percepción sensorial diferente
Es una realidad que la persona con Asperger tiene algunas diferencias en su forma de percepción y puede llegar a ser más o menos sensible a los sonidos, olores o al tacto que otras personas. A veces, evitarán esos estímulos o necesitarlos de forma limitada.
Necesitan mucha repetición
Cada vez que se repita una situación similar, deberás repetir algo que ya dijiste anteriormente y es que la persona con Asperger, cada vez, tiende a actuar más del mismo modo y es probable que, de la misma forma que no capta que tu necesitas su presencia, tú no captarás las veces que él necesita silencio o soledad o cuando él necesita que no lo invadan sensorialmente.
Tono de voz
Los pacientes con Asperger tienen un uso diferente del tono de la voz y es por eso por lo que puede que su forma de hablar o sus gestos no sean acordes a la situación. Y es que, desde fuera, pueden aparentar estar molestos cuando, en realidad, están de buen humor o que una persona no les cae bien cuando en realidad sí.
Diferente empatía
Otro rasgo distintivo de las personas con Asperger es que su nivel de empatía es diferente pero esto no quiere decir que sean mucho más insensibles a lo que les rodea, sino que hay veces en las que pueden no comprender el motivo de preocupación que genera cierta situación en otra persona.
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