Cuando se trata de equipos médicos, las consideraciones para elegir la mejor opción deben basarse en el conocimiento total del área que se pretende cubrir. En el campo de la radiología, los especialistas tienen dos opciones generales que se refieren a las pantallas comerciales y a las pantallas de grado médico.
Las pantallas comerciales suelen vender la idea de promover especificaciones que parecieran acercarse a las que se encuentran en los monitores de grado médico. Por otra parte, los supuestos beneficios se hallan sumamente alejados de la realidad porque existen diferenciadores clave que sólo las pantallas certificadas ofrecen a los radiólogos.
1. Brillo
Las pantallas no reguladas pueden mostrar a primera vista una calidad de brillo aceptable, sin embargo, a medida que pasa el tiempo, ésta tiende a deteriorarse, con colores menos vívidos. Para los especialistas en radiología, es esencial que el brillo y la luminiscencia a lo largo de la vida de la pantalla sea constante. Además, es importante que cumplan con la Norma DICOM 3.14 estándar médico mundial, que define cómo se deben mostrar las imágenes en escala de grises en las pantallas médicas para que puedan mostrarse de forma coherente en todo momento.
2. Ruido
Para los especialistas en radiología, las pantallas de grado médico le permiten reducir considerablemente los niveles de ruido en la imagen, por lo cual se le proporciona un brillo constante y una presentación en escala de grises mejorada, lo que garantiza una mejor visualización de las anomalías radiográficas sutiles.
3. Ángulo de Visión
Las pantallas convencionales no se adaptan a criterios específicos como lo es el ángulo de visión. En el caso de las pantallas médicas, son 100% compatibles con ACR en todo el campo de visión, conservando un mínimo de 350 cd / m², una alta relación de contraste y excelentes valores de color bajo diferentes ángulos a observar.
Este tipo de particularidades propias de las pantallas de grado médico, permiten observar con mayor precisión detalles perceptibles únicamente con equipos de alta calidad.
4. Multimodalidad
La multimodalidad es un aspecto clave para los radiólogos, ya que les ayuda a concentrar la información en una sola pantalla de trabajo, con mayor confianza y mejorando la detección del diagnóstico. A diferencia de las pantallas convencionales, equipos como el Coronis Uniti y el Coronis Fusion, se han diseñado específicamente para la obtención de imágenes multimodal. Su factor de forma de pantalla permite ver múltiples modalidades tanto en color como en escala de grises, en una sola pantalla, lo que permite comparaciones lado a lado y fusiones de imágenes en poco tiempo, sin cambiar de pantalla.
5. Lectura Ergonómica
Los especialistas se enfrentan a horarios extenuantes, entre fines de semana y largas jornadas laborales, que pueden derivar en estrés y fatiga. De acuerdo a un estudio realizado por The MarkeTech Group, el 87% de los radiólogos experimentan algún tipo de malestar físico al leer imágenes, por ello, las pantallas de grado médico deben ofrecer al especialista mejorar la productividad clínica a través de funciones integradas, para controlar la iluminación ambiental o aumentar el brillo de la pantalla, y vidrio no reflectante para mejorar la ergonomía de lectura.
Las pantallas médicas también suelen ser más grandes, por lo que es posible ver una imagen completa en una sola pantalla, sin la necesidad de desplazarse o hacer zoom. Por último, la capacidad de escala para ajustar en las tecnologías también hace que la lectura sea más eficiente y ergonómica.