A través de un mensaje virtual el titular de la Secretaría de Salud (SSa), Jorge Alcocer Varela, inauguró la Reunión Nacional de Farmacovigilancia y Rendición del Informe Anual de la Comisión Permanente de la Farmacopea de los Estados Unidos Mexicanos. Se trata de un evento en el que se mencionan los trabajos más recientes para garantizar el correcto funcionamiento de las medicinas y las técnicas de atención a los pacientes.
Durante su discurso mencionó que un medicamento no debe representar un riesgo para la salud, por lo que se mantiene la vigilancia permanente desde su producción, manejo y aplicación por personas expertas en farmacología para la oportuna detección de eventos indeseables y su abordaje.
¿Qué es la farmacovigilancia?
Indicó que desde la SSa se impulsa el sistema de vigilancia en todas las unidades y dependencias de salud públicas y privadas, porque “hoy dejamos claro que ningún sector de la población debe estar ajeno al beneficio de la farmacovigilancia y es oportuno que todas las instituciones de salud participen de este nuevo proceso”.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, sostuvo que la farmacovigilancia permite conocer los riesgos de medicamentos y prevenir reacciones adversas.
Explicó que una enfermedad inducida por un fármaco tiene significado diferente en cada contexto social. Por tanto, las acciones de identificación, diagnóstico, reparación y prevención del daño secundario y terciario deben encaminarse a conocer el entorno para priorizar la atención de la salud.
El titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), Alejandro Svarch Pérez, explicó que la farmacovigilancia involucra medicamentos y vacunas que han sido esenciales para hacer frente a la pandemia de COVID-19, y que esa labor aún no termina.
“Ante ello, la nueva política de medicamentos seguros de calidad, eficaces, gratuitos y accesibles para la población, es tarea impostergable y un mandato del Gobierno de México para atender los desafíos como la inequidad, falta de acceso y corrupción”.
Esta nueva política de medicamentos contempla la vigilancia en el proceso de fabricación, dispensación, almacenaje y prescripción de fármacos, ya que su eventual falsificación, uso irracional o ilegal representan riesgos a la salud.
Actualización a las guías de farmacovigilancia y farmacopea
El director ejecutivo de Farmacopea y Farmacovigilancia de Cofepris, Felipe de la Sancha Mondragón, presentó la actualización de la Farmacopea de los Estados Unidos Mexicanos 13.0, en tres tomos y tres mil 500 páginas, con mil 191 unidades de monografías y cuatro métodos de análisis donde, adicionalmente, se consideran algunos medicamentos utilizados para el tratamiento de COVID-19.
Sancha Mondragón también entregó la Farmacopea Herbolaria de los Estados Unidos Mexicanos 3.0, que considera 46 métodos generales de análisis para el control de la calidad de plantas medicinales, 132 monografías de drogas vegetales y 28 de aceites, así como ocho apéndices. Esta edición impresa y en línea incluye 49 monografías nuevas y la actualización de 90 ya existentes.
La farmacopea herbolaria contiene algunas monografías representativas de la flora nativa de México, como es el caso del gordolobo mexicano, y en la extra-farmacopea, la flor de manita, la sangre de drago y la chirimoya, explicó.
Finalmente, el representante de las organizaciones Mundial y Panamericana de la Salud (OMS/OPS) en México, Cristian Morales Fuhrimann, mencionó que, con estas acciones, la Cofepris avanza como una dependencia fuerte, independiente, moderna y con capacidad para proteger de forma efectiva a la población de los riesgos sanitarios.