La terapia física, se ha usado principalmente para paliar molestias musculares y contracturas producidas por la práctica deportiva. De ahí, que, la cinta kinesiológica se convierta en una herramienta útil, que ayuda al organismo en el proceso de regeneración, sin alterar el movimiento. Sobre todo, porque su aplicación terapéutica favorece no solo a los deportistas, sino a toda la población en general.
Es así, como este vendaje elástico autoadhesivo de diferentes colores, fue diseñado por el médico quiropráctica japones Kenzo Kasa en el año 1979. Buscando subsanar el efecto de las vendas estándar que limitan el movimiento y ralentizan la curación de los tejidos dañados. De tal manera, que siguiendo la interrelación de las fascias se dé un efecto analgésico, circulatorio y neuro mecánico.1
La cinta kinesiológica favorece la recuperación
Hoy en día, vemos muchos deportistas aprovechando los beneficios de la cinta kinesiológica. Sin embargo, la gente del común, también puede acceder a ella, porque se encuentra disponible en las tiendas médicas. Además, es muy recomendada por los fisioterapéuticos, como coadyuvante en el tratamiento, recuperación y rehabilitación de tejidos musculares y ligamentos.
De esta forma, notamos que el campo de acción de esta venda de textura similar a la piel humana, está ligado a la actividad deportiva, rehabilitación física, traumatología, post quirúrgicos, tratamientos quiroprácticos, podología y fisio-estética. Tanto así, que es muy útil para recuperar lesiones como tendinitis, esguinces y contracturas de diferente índole.1
Además, la cinta kinesiológica; gracias al soporte que ejerce sobre las diferentes fascias del cuerpo humano; se convierte en un potente analgésico, ya que, aumenta la circulación linfática y reduce la fatiga muscular. A la vez, que actúa sobre la propiocepción articular, paliando los síntomas de dolor y malestar de una manera muy natural.2
Es así, como la aplicación de este vendaje en diversas zonas del cuerpo; como el tobillo, rodilla, hombro o espalda, de una manera específica, dictada por los especialistas en fisioterapia; lleva a realizar un drenaje linfático y una reeducación postural, que realmente regenera. Al mismo tiempo, que permite que no limite la amplitud de movimiento, mientras la parte lesionada sana completamente.
La forma de colocación es lo que importa
Podemos decir, que la cinta kinesiológica aporta bienestar. Especialmente, porque disminuye la producción de impulsos nerviosos de dolor al cerebro, mejorando la recuperación. Sin embargo, es necesario saber que, su uso puede convertirse en una medida preventiva para disminuir el riesgo de futuras lesiones.2
Y aunque la tensión, la forma y la colocación de la cinta kinesiología, es lo más importante para cumplir con la función de permitir el movimiento mientras se recupera de una lesión, el color es uno de sus atractivos. De ahí, que el fisioterapeuta opte por aplicar el test kinesiológico donde se mide la valoración de respuesta muscular del individuo.
Sin embargo, la cromoterapia seduce con mayor frecuencia a los pacientes, haciendo que para las lesiones crónicas se usen colores cálidos, ya que, aumentan la concentración de temperatura. Asimismo, para las lesiones agudas; como procesos inflamatorios derivados de una tendinitis; se aconsejan los colores fríos. Pero, en caso de estrés el color verde o naranja, puede considerarse ideal.
Referencias:
- Ximena María Villota Chicaiza. Vendaje neuromuscular: Efectos neurofisiológicos y el papel de las fascias. Rev. Cien Salud. [internet] 2014 [consultado 2 agos 2021];12(2): 253-69. Disponible en: http://www.scielo.org.co/pdf/recis/v12n2/v12n2a10.pdf.
2.Calero PA, Cañón GA. Efectos del vendaje neuromuscular: una revisión bibliográfica. Rev. Cien. Salud. [internet] 2012 [consultado 2 agos 2021]; 10 (2): 273-284. Disponible en:
http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1692-72732012000200009.