Muchas personas en roles de supervisión o gestión de personal creen que son un líder para el resto de los colaboradores. Esto es, en parte, porque se ha escrito mucho acerca del liderazgo y cómo es fundamental para el crecimiento de las organizaciones.
Desafortunadamente, en muchas ocasiones un líder no es más que un jefe con una visión parcial de los hechos. Si quieres saber si verdaderamente tú o tu supervisor tienen la capacidad para inspirar y gestionar positivamente al equipo de trabajo en el sector salud, revisa estas señales:
Hay buenas ideas, pero no retroalimentación
Como dice el dicho: “Dos cabezas piensan mejor que una”. Un líder médico sabe que, cuando se trata de grandes proyectos o iniciativas, es fundamental tener la opinión del equipo. No solo se sentirán involucrados con el proceso, pueden crear, en conjunto, un mejor plan de acción.
No se usan los canales correctos de comunicación
Así como no todas las noticias y anuncios ameritan una reunión que interrumpa las actividades de todo el consultorio, hay cosas que no pueden ser dichas en un simple correo electrónico. Un líder necesita identificar cómo se puede transmitir mejor un mensaje, según el contexto y contenido.
Se preocupan por las tareas y no por la cultura organizacional
Muchos jefes creen, erróneamente, que el sentido de pertenencia al centro médico es algo que se desarrolla espontáneamente. Por el contrario, es algo a lo que se le debe de invertir tiempo y esfuerzo. Un líder no se encarga simplemente que todos los pacientes sean atendidos, sino que sus colaboradores también se sientan a gusto en su ambiente.
Les es más sencillo ordenar que retar
Un líder siempre procura empoderar a las personas para encontrar formas nuevas de enfrentar los retos en el día a día. Un jefe simplemente se limita a decir cómo deben hacerse las cosas con los pacientes o en el consultorio, ya sea porque cree que su forma es la mejor (o única) que hay o porque no confía en su gente.
El líder sabe qué pasa con su personal
Cuando a un jefe se le pregunta por el estado de alguien en su personal, probablemente se referirá a su desempeño reciente o algún otro indicador laboral. Una persona no puede verdaderamente inspirar a otras si no sabe de sus problemas, preocupaciones y metas.