Uno de cada tres mexicanos mayores de edad padece hipertensión arterial, enfermedad crónica degenerativa cardiovascular que registra 7 millones de casos y provoca más de 50 mil muertes al año, dio a conocer el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
“Se estima que hasta 80 por ciento de la población vive con esta enfermedad silenciosa, que no da síntomas y está relacionada con el sobrepeso y obesidad”, afirmó el jefe de la Clínica de Trasplantes y Asistencia Ventricular del Hospital de Cardiología del Centro Médico Nacional Siglo XXI, José Ángel Cigarroa López.
Destacó que México registra una de las prevalencias más alta de hipertensión arterial en todo el mundo, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012. Señaló que ello se debe a la falta de un diagnóstico oportuno y al desconocimiento de los factores de riesgo que pueden detonar que se eleve la presión arterial.
Ante la gravedad de esta enfermedad, el especialista mencionó que cada día esta enfermedad causa la muerte de 138 personas, por lo que el IMSS puso en marcha el Modelo Preventivo de Enfermedades Crónicas, para combatirla y prevenirla junto con la diabetes y los cánceres de mama y próstata.
El Instituto Mexicano del Seguro Social aplica el tratamiento integral de este nuevo modelo directamente en las empresas, a fin de que los trabajadores se realicen estudios de laboratorio, mediciones de glucosa y presión arterial, verificar su peso y talla, así como detección de tumores en mama y próstata, además de orientarlos en alimentación saludable con el objetivo de darles seguimiento y prevenir otros factores de riesgo.
El cardiólogo del IMSS expuso que los factores de riesgo que contribuyen al desarrollo de hipertensión tienen que ver con el estilo de vida, tales como consumo de alimentos con exceso de sal y grasas, ingesta de alcohol, consumo de tabaco, estrés mal controlado, sedentarismo, obesidad, sobrepeso, edad y antecedentes familiares.
Cigarroa López explicó que la presión sistólica (alta) es igual o superior a 140 milímetros de mercurio, unidad de medida para la presión; y la diastólica (baja), igual o superior a 90 milímetros de mercurio. “Sin los niveles normales de presión, será deficiente el funcionamiento de órganos vitales como corazón, cerebro y riñones”.
Con una alimentación balanceada, práctica de ejercicio y control del peso corporal, las personas con hipertensión pueden reducir entre 5 y 10 unidades las cifras de presión arterial.
Imagen: IMSS