Después de ocho años sin poder comunicarse con su entorno, Hanneke de Brujine, un mujer que padece Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), pudo entablar una comunicación con sus familiares con ayuda de un chip y una tablet.
Esto fue posible después de que los médicos a cargo instalaran un chip en la cabeza de la paciente. Poco tiempo después, Brujine fue capaz de escribir pequeñas oraciones.
De acuerdo al estudio publicado en la revista New England Journal of Medicine, la mujer vivía sin problemas cuando los médicos le diagnosticaron ELA. Sin embargo, sus neuronas iniciaron un proceso de degeneración y al mismo tiempo, su médula espinal dejó de obedecer a las órdenes del cerebro.
Hanneke podía ver y oír, pero era incapaz de hablar, comer o moverse”, dijeron los médicos. No obstante, con ayuda de su familia, Brujine se sometió a un experimento con el cual su cerebro pudo convertirse en un control remoto.
El trabajo de investigación fue exitoso y ahora la paciente es capaz de salir a la calle, pasear y salir de compras. “Ella ahora es capaz de comunicar sus sentimientos”, mencionaron los expertos.
Gracias a la ciencia, Hanneke puede comunicarse con las personas con ayuda de una tablet que, cuando desea escribir una palabra, le da la orden con su cerebro para teclear. Se trata de una comunicación con señales eléctricas. Ahora ella es capaz de escribir palabras para dar a conocer cómo se siente o para informar que desea tomar agua o para decirles a sus hijos que los quiere”, explicó Nick Ramsey, líder del equipo de investigadores de la Universidad de Utrech, Países Bajos.
El científico destacó que será hasta el próximo año cuando sigan experimentado con más personas. Agregó que pedirán fondos para realizar el estudio a nivel internacional.