Investigadores del Centro Médico Nacional Siglo 21 se encuentran trabajando en el desarrollo de un estudio que tiene como base la tecnología genómica, con la finalidad de identificar marcadores genéticos para el diagnóstico de leucemia linfoide en niños.
“Una vez que tengamos los resultados, los médicos, además de tomar decisiones terapéuticas, podrán diferenciar de forma más eficaz los grupos de riesgo”, declaró el especialista del Laboratorio de Genómica del Cáncer del Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen), Alfredo Hidalgo Miranda.
“Esta clase de estudio es el primero que se realiza en México. Aglutina grupos clínicos de investigación y especialistas en tecnologías genómicas”, declaró Hidalgo Miranda a la Agencia Informativa del Conacyt.
Como parte de este proyecto, las doctoras del Instituto Nacional de Pediatría (INP) Patricia Pérez Vera y Adriana Reyes León, iniciaron un proyecto que incluye el análisis de variantes del gen ARID5B.
De acuerdo a algunas publicaciones internacionales especializadas, este gen se encuentra asociado a la susceptibilidad y riesgo de recaída con leucemia linfoblástica aguda.
Al respecto, Pérez Vera informó que los polimorfismos podrían ser identificados como marcadores de susceptibilidad de desarrollo de este tipo de cáncer infantil en niños de México.
“Existen polimorfismos genéticos que pueden ser variaciones de un sólo nucleótido y son propios de cada población, que se han asociado a la susceptibilidad de desarrollar leucemia”, comentó.
“Uno de los objetivos principales es saber por qué los mexicanos son más susceptibles a este tipo de padecimientos”, dijeron los especialistas quienes no soslayan la posible participación de factores ambientales a los que son expuestos los fetos o niños, lo que podría explicar la alta tasa de leucemias linfoides en nuestro país.
“Durante la concepción, el niño ya lleva una alteración genética. Cuando nace, la madre podría exponer a su hijo a sustancias cancerígenas como las del tabaco a través de la leche materna”, afirmaron los investigadores quienes esperan entender las diferencias en el pronóstico de la enfermedad en pacientes mexicanos tras analizar la genética de niños con cáncer, comparado con otras zonas del mundo.