Cáncer de próstata, primera causa de muerte en hombres mayores de 65 años en México

De acuerdo con la Secretaria de Salud, uno de cada siete mexicanos padecerá cáncer de próstata en algún momento de su vida.

El cáncer es una de las principales causas de muerte en nuestro país, siendo los más recurrentes: mama, próstata, cérvicouterino, colorrectal y pulmón. En el caso del género masculino, el cáncer de próstata representa la primera causa de decesos en hombres mayores de 65 años. De hecho, según la Secretaria de Salud (SSa), uno de cada siete mexicanos padecerán esta enfermedad a lo largo de su vida.

Esta enfermedad representa un importante reto de salud en lo que se refiere a prevención. Es por ello que el Dr. Óscar Martínez, especialista en enfermedades crónico degenerativas y Director Ejecutivo de Grupo SOHIN, comparte cuatro factores de riesgo que pueden ayudar a una detección oportuna del cáncer de próstata:

Edad
Más del 60 por ciento de los casos de cáncer de próstata se diagnostican en hombres mayores de 65 años. Por ello, lo más recomendable es que invites a tus pacientes para que a partir de los 50 años se realicen estudios preventivos de manera regular.

Sintomatología
Por lo general el cáncer de próstata no presenta síntomas visibles en su etapa inicial; sin embargo, es importante estar pendiente a ciertas señales que pueden indicar un problema. Siempre es indispensable la valoración de un médico para poder confirmar o desmentir la enfermedad.

Herencia
En caso de que en la familia directa exista algún antecedente de cáncer se debe aconsejar al paciente realizarse el estudio a partir de los 40 años de edad. Para este tipo de casos la probabilidad de padecerlo se eleva hasta más de 50 por ciento.

Estilo de vida
Algunos hábitos saludables pueden ayudar a reducir las probabilidades de tener cáncer de próstata. Por ejemplo, evitar el cigarro, realizar actividad física de manera regular, mantenerse hidratado y nivelar el consumo de carnes rojas.

Recuerda a tus pacientes que hoy en día existen diferentes test genéticos que les permiten conocer su predisposición incluso antes de la aparición de los primeros síntomas. Algunas de las pruebas más sofisticadas necesitan únicamente una muestra de saliva para detectar mutaciones en los genes.