El cáncer de mama es una de las principales enfermedades que sufren las pacientes femeninas. El tratamiento contra esta enfermedad está compuesto, básicamente, por Arimidex y tamoxifeno, los cuales se toman tras el tratamiento para el cáncer de mama. Ahora, se ha descubierto que la acupuntura alivia las sudoraciones y sofocos nocturnos comunes entre las mujeres.
En un ensayo clínico, la acupuntura alivió los sofocos, tanto como el Effexor, el antidepresivo que actualmente se receta a las mujeres que sufren los efectos menopáusicos de los medicamentos contra el estrógeno. Además, el Effexor, de por sí, tiene efectos secundarios problemáticos, pero la acupuntura no, tal y como ha señalado la líder de este estudio, Eleanor Walker, MD, oncóloga de radiación del Hospital Henry Ford, de Detroit.
La acupuntura es una técnica de la medicina china
Tal y como ha indicado Walker, “con la acupuntura se puede obtener tratamiento par los sofocos que alivian igual que la terapia farmacológica, sin los efectos secundarios y con una mejor calidad de vida“.
La acupuntura es una técnica de la medicina china. Esta conlleva el proceso, generalmente indoloro, de colocar agujas extremadamente en la piel en puntos de acupuntura específicos. Los acupunturistas conciben estos puntos como nodos donde convergen las líneas energéticas del cuerpo, aunque estas líneas energéticas no corresponden a ninguna estructura física conocida por la medicina occidental.
Walker y sus compañeros estudiaron a 47 mujeres que recibían tamoxifeno o Arimidextras, el tratamiento para el cáncer de mama. Cada mujer sufría, al menos, 14 sofocos a la semana. La mitad de las mujeres fue tratada con Effexor por 12 semanas y la otra mitad recibió acupuntura. Ambos grupos tuvieron reducciones significativas en los sofocos y otros síntomas de la menopausia. Ambos grupos también tuvieron menos síntomas de depresión.
Aunque las mujeres que tomaron Effexor también tuvieron efectos secundarios negativos. Estos incluían náuseas, dolores de cabeza, resequedad bucal, dificultad para dormir, mareo, visión doble, mayor presión arterial, fatiga, ansiedad, estreñimiento, sentirse “descolocadas” y agitación corporal durante la noche.
Es una forma de ayudar a regular el cuerpo
Las mujeres que recibieron acupuntura no tuvieron ninguno de estos efectos secundarios, pero sí reportaron aumentos en la energía, claridad de pensamiento, deseo sexual y bienestar general.
Queda claro, por tanto, con este estudio, que la acupuntura es una forma de ayudar a regular el cuerpo y fomentar lo que normalmente haría. “Si alguien toma un medicamento para alterar una afección, la acupuntura no interfiere con eso. Respaldará al sistema para ayudarlo a manejar mejor el tratamiento”, tal y como ha afirmado la principal investigadora de este estudio.