Como bien sabes, la resistencia bacteriana se ha convertido en uno de los principales retos de salu a vencer en el futuro próximo. En este sentido un nuevo estudio confirmó la seguridad y tolerabilidad del uso de virus específicos de bacterias, conocidos como bacteriófagos, para eliminar las bacterias que causan enfermedades en el intestino.
El tratamiento en cuestión ha llamado la atención, pues podría usarse en lugar de antibióticos para eliminar las bacterias dañinas del intestino y promover el crecimiento de bacterias beneficiosas que mejoran la salud gastrointestinal, la función inmune y los procesos antiinflamatorios.
El co-investigador del estudio, Taylor C. Wallace, director y CEO de Think Healthy Group Inc afirmó que “las personas que toman antibióticos pueden desarrollar resistencia y experimentar problemas gastrointestinales ya que los antibióticos matan las bacterias malas y buenas en el intestino”.
Usar virus que infectan sólo tipos específicos de bacterias salva muchas bacterias buenas en el intestino, que están vinculadas a numerosos resultados de salud benéficos a largo plazo. Hemos demostrado por primera vez que el tratamiento con bacteriófagos no tiene efectos secundarios aparentes, al menos con uso a corto plazo .
Los bacteriófagos pueden usarse para combatir selectivamente microorganismos específicos en personas sin causar ningún tipo de infección o alterar el microbioma del cuerpo en su conjunto. El estudio incluyó a 31 personas que informaron trastornos gastrointestinales significativos al comienzo del estudio, pero que no fueron diagnosticadas con ningún trastorno gastrointestinal específico.
Los participantes del estudio fueron asignados a un grupo de placebo o de tratamiento durante las primeras cuatro semanas del estudio, seguido de un período de lavado de dos semanas y cuatro semanas adicionales en el tratamiento opuesto. El grupo de tratamiento recibió cuatro cepas de bacteriófagos que eliminan específicamente E. coli, un patógeno que puede contribuir a las irregularidades gastrointestinales y al malestar estomacal.
Los investigadores afirman que los participantes del estudio toleraron muy bien el tratamiento con bacteriófagos. Durante el tratamiento con bacteriófagos , observaron disminuciones significativas en la interleucina 4, un marcador inflamatorio a menudo asociado con la respuesta alérgica.