Nadie puede negar que internet se ha vuelto en un gran aliado para millones de personas, pero cuando se trata de cuidar nuestra salud, puede convertirse en un arma de doble filo.
Cuida a tus pacientes del autodiagnóstico
Seguramente en tu quehacer profesional has tenido que lidiar con muchos casos de autodiagnóstico. Este problema se ha vuelto más frecuente debido a que la gente sólo necesita dar un clic para acceder a una gran cantidad de información de salud, la cual en muchas ocasiones puede estar basada en datos poco confiables. Y lo peor de todo, es que las personas lo hacen sin consultar a un profesional de la salud.
Por tal motivo, te presentamos algunos de los riesgos más frecuentes de autodiagnóstico médicos que debes evitar en tus pacientes:
No ir al médico
No darle importancia a algunos síntomas puede ser el primer error de autodiagnóstico. Una persona podría pensar que esa extraña sensación en el pecho podría deberse a una condición de ansiedad o estrés. Sin embargo, un estudio clínico podría revelar una arritmia del corazón. Podría ser difícil reducir este tipo de riesgo, por tal motivo te corresponde educar a tus pacientes desde tu consultorio para que no caigan en este error que podría ser fatal.
Tratamiento incorrecto
Uno de los riesgos más comunes tiene que ver con que la gente se administra a sí misma medicamentos que no les funcionarán en absoluto, o que podrían poner en peligro su salud. Alguien podría tratar bajar de peso con pastillas que le fueron recetadas a otra persona, o adquirir un tratamiento a través de charlatanes que sólo buscan estafar a la gente. Este riesgo aumenta cuando los tratamientos no tienen un respaldo científico y son mal utilizados por los pacientes.
Volverse un paciente ciber-hipocondriaco
Mucha información que la gente obtiene en internet podría ser errónea por lo que podrían sacar una conclusión equivocada acerca de su condición de salud. Los clásicos dolores de cabeza podrían ser confundidos con tumores cerebrales o los dolores estomacales con otros problemas gástricos.
Recurrir a sitios poco confiables
Si bien algunas páginas que ofrecen contenidos de salud pueden dar algunos consejos valiosos, nada se compara con obtener la información directamente del profesional de la salud.