Los acontecimientos dramáticos conectan y reconfiguran nuestras vidas, ayudan a definir quiénes somos y en qué nos convertimos. Los períodos importantes de transición, como las emociones en la escuela, un viaje de mochilazo, pueden tener una gran repercusión en el autoconocimiento y el rumbo que toma la vida.
Los efectos físicos, mentales y espirituales de la pandemia de coronavirus fueron enormes. En la última encuesta de previsión mundial, se confirmó que el futuro ya no es lo que era, el 37% de las personas encuestadas afirma que la pandemia las impulsó a replantearse su propósito y sus prioridades en la vida, mientras que el 41% declaró que, si pudieran volver a hacerlo, elegirían una carrera diferente, además, el 65% espera más del trabajo y de la vida.
Se confirmó que el COVID-19 despertó nuevos comportamientos y generó una mayor conciencia social sobre temas que se vienen planteando desde hace años, así cómo cada vez más personas exigen reconocimiento y responsabilidad.
Con frecuencia, las marcas son una expresión de los valores personales. Si bien la tecnología desempeña un papel muy importante, a la hora de conectarnos y de impulsar los movimientos sociales, las personas también son más conscientes del tiempo que pasan frente a la pantalla, así como del poder de la conexión interpersonal.
Además, surgieron cuatro temas clave: la diversificación de las identidades, la renegociación de las relaciones, el aumento de las expectativas y la ampliación de los valores. Dentro de cada uno, se identificaron cinco tendencias, que dan como resultado una nueva forma de ver el mundo, que muestra cómo las personas se conectarán, crearán y consumirán en los próximos años.
La autenticidad y la autoexpresión se expanden, evolucionan, y crean identidades nuevas y más fluidas. En el proceso, aquello que nos divide también puede unirnos. El valor de la conexión humana nunca fue tan alto, pero las relaciones modernas adoptan una forma más flexible, desde el modo en que las personas se relacionan con sus dispositivos, hasta cómo se conocen, aman, van al médico e interactúan.
Actualmente, cumplir con el propósito de marca, es un tema de gran valor, ya que los consumidores o pacientes esperan que las empresas resuelvan los problemas de la sociedad. Adaptarnos a las tendencias culturales es una oportunidad para la marca, cuando se hace con autenticidad.
Hoy, la diversidad puede marcar la diferencia en publicidad y promoción. Hablar o escuchar a diferentes perfiles de usuarios, amplía la oportunidad de incursionar en nuevos mercados que se conforman por comunidades que nunca hubieras pensado, que existían.
Fuente:
Facebook – Meld je aan of registreer je. (s. f.). Facebook. https://www.facebook.com/unsupportedbrowser