Si una persona padece hipertensión, el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares aumenta, puesto que su sangre ejerce demasiada presión en las arterias. Es habitual querer corregir esta hipertensión a través de cambios en la dieta como, por ejemplo, reducir la ingesta de sal, tomar café descafeinado o disminuir el consumo de carnes rojas. Aunque para la gran mayoría de quienes padecen tensión alta, la solución es acabar tomando una pastilla diaria.
Sangrado nasal, confusión y dolores de cabeza son los síntomas más comunes de la hipertensión
Entre los síntomas más comunes de la hipertensión se encuentran el sangrado nasal, la confusión y los dolores de cabeza. Aunque más allá de los síntomas físicos, también pueden aparecer síntomas psicológicos, aunque no se suelen tener en cuenta. Ahora, se ha demostrado que la tensión arterial alta está relacionada con síntomas depresivos y trastornos de salud mental como la ansiedad y el neuroticisimo.
Un grupo de Expertos del Centro de Innovación Colaborativa de Genética de Innovación Colaborativa de Genética y Desarrollo de la Universidad Jiao Tong de Shanghái ha lanzado una investigación en la que se tratan las relaciones causales genéticas entre la presión arterial y la ansiedad, así como los síntomas depresivos como el bienestar subjetivo y el neuroticismo.
También acelera el envejecimiento de los huesos
Los resultados de este estudio fueron claros y señalaron que la presión arterial está relacionada con el neuroticismo, aunque no con la ansiedad o la depresión. El origen de los estados depresivos y ansiosos de un paciente con hipertensión están provocados precisamente por la personalidad neurótica.
Asimismo, la doctora ingeniería biomédica en la Universidad d e Vanderbilt en Estados Unidos, Elizabeth Maria Hennen, ha dirigido un estudio que ha demostrado que la hipertensión podría acelerar el envejecimiento de los huesos. Para ello, los investigadores indujeron presión arterial alta en ratones jóvenes, los cuales respondieron con pérdida y daño óseo relacionado con la osteoporosis que podría compararse al de los ratones de más edad.