De todas las inmunizaciones que se han desarrollado contra la Covid-19 hasta el momento, la de Johnson & Johnson ha sido una de las más controvertidas. Su principal atractivo es que solo requiere de una inyección, por lo que es más económica que el resto. Aunque también se ha cuestionado su eficacia y los efectos secundarios que provoca. Mientras que ahora de nuevo se encuentra en tendencia porque probablemente requiere de una dosis de refuerzo para garantizar una correcta protección a largo plazo.
Dentro de la parte negativa, la vacuna de Johnson & Johnson ha sido asociada con casos de trombosis que se han presentado en distintas parte del mundo. Como consecuencia Dinamarca ya suspendió por completo su aplicación. Mientras que Bélgica solo la recomienda en mayores de 41 años.
Pese a las críticas la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha hecho énfasis en que los beneficios son mayores a los posibles riesgos. Por lo tanto no se le debe tener miedo a la vacuna y recibirla si así lo consideran las autoridades sanitarias locales.
Mientras que lo positivo es que los resultados de los ensayos clínicos mostraron que tiene una eficacia promedio del 66 por ciento contra la enfermedad. Aunque cuando se trata de hospitalizaciones aumenta hasta el 90 por ciento. En cualquier caso, es necesario que transcurran 14 días para comenzar a generar anticuerpos.
¿Cómo es su funcionamiento?
Por su parte, mientras otras vacunas utilizan nuevos métodos en su desarrollo como las de Pfizer y Moderna, la de Johnson & Johnson usa como base el virus del resfriado común conocido como adenovirus tipo 26 para introducir proteínas del coronavirus en las células del cuerpo y desencadenar una respuesta inmunitaria. Por lo anterior no requiere de cuidados especiales en su almacenamiento y transporte. Eso la vuelve una opción ideal para países que carecen de equipos de ultracongelamiento.
Aunque a raíz de la aparición de nuevas variantes algunas farmacéuticas han solicitado cambiar su esquema de inmunización. La primera fue Pfizer al solicitar permiso para aplicar una tercera dosis y después de varias revisiones le fue otorgado. La siguiente en la lista fue Moderna y en una primera revisión con los asesores de la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) también obtuvo el visto bueno.
En tanto que el día de hoy le tocó a Johnson & Johnson verificar si es necesaria una dosis de refuerzo. Como lo informa CNN, el Consejo del Comité votó con unanimidad por el sí. Aunque no es un veredicto final sí es una decisión que influye para que en próximos días se publique el veredicto definitivo.
Al igual que ha ocurrido con Pfizer y Moderna, la dosis adicional no sería para todos. En este caso solo se recomienda a personas mayores de 60 años o de grupos de riesgo. Además deben transcurrir al menos seis meses de haber recibido el biológico para poder acceder a la segunda inyección.