A diferencia de los que muchos esperaban, la vacuna contra el COVID-19 no ha sido la solución definitiva, al menos de momento. Si bien es cierto, que a medida que pasa el tiempo, muchas personas han sido vacunadas, también es una realidad que actualmente solo un pequeño grupo ha sido privilegiado, que no cubre ni el 1% de la población.
En México, apenas estamos atravesando la primera etapa y aunque los esfuerzos han sido enormes la curva de contagios sigue el alza y parece no parar. En el último reporte que emitió la Secretaría de Salud, se han infectado hasta la fecha más de 1.690.000 personas y muerto más 145.000 y en las últimas semanas se han reportado entre 800 y 1000 muertes diarias a lo largo del territorio.
Lo mismo ocurre en otros países de América Latina como Colombia, Brasil, Chile, Argentina y Perú por nombrar los más golpeados. A pesar de la crisis sanitaria actual se habla de una apatía por parte de la población que al parecer no les preocupa mucho el tema de la pandemia. O al menos, eso es lo que demuestran.
No es la forma de crítica pero existe más preocupación por los problemas que se derivan de la pandemia, como la economía, el desempleo y la pobreza que se incrementa cada día. Es por ello, que muchos países como Venezuela, México y Colombia han ido de alguna manera “bajando la guardia” y han buscado la forma de reactivar la economía haciendo un alto a la cuarentena y dándole a los ciudadanos ciertas medidas de flexibilización para que puedan cubrir sus necesidades básicas.
La OMS expresó preocupación por la apatía de la población de algunos países de América Latina
Frente a las medidas sanitarias para contener la enfermedad del Covid-19, hecho que se ha evidenciado en el aumento de contagios y muertes en muchas regiones en las últimas semanas. El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, se refirió en particular a Brasil y México por el incremento de afectados por la pandemia. No olvidemos que estos dos países son los más golpeados en relación al porcentaje de contagios por cada 100.000 habitantes.
En el caso de Brasil, que a la fecha registran más de 6.335.878 contagios y 173.120 fallecidos, hasta el 20 de enero. Con respecto a esto el jefe de la OMS pidió al gobierno del gigante suramericano que se tome “muy en serio” el aumento de casos del Covid-19 registrados en el país en las últimas semanas.
Respecto de México, advirtió también que “el ritmo del incremento de casos y muertes es muy preocupante”. Tedros destacó que tanto el número de fallecidos de contagios se ha incrementado en más de un 30% en relación al pasado mes de diciembre. “Creo que esto muestra que México está en mal estado”, destacó el máximo representante de la Organización, quien añadió que “cuando ambos indicadores, las muertes y los casos, aumentan, es un problema muy serio. Nos gustaría pedirle a México que sea muy serio”.
Con respecto a la observaciones que se han hecho de que presidentes como Andrés Manuel López Obrador y Bolsonaro en Brasil, no utilicen las mascarilla en sus apariciones públicas, Tedros indicó que la Organización no entra en comportamientos individuales sobre si hay personas que llevan mascarilla o no, pero resaltó la importancia de llevarla, de mantener la distancia de seguridad y de que “los líderes den ejemplo”.
“Queremos que los líderes se conviertan en modelos (de comportamiento), queremos que las personas influyentes también lo sean. Cuando decimos líderes pueden ser líderes políticos, pueden ser líderes religiosos, pueden ser líderes tradicionales y pueden ser otras personas influyentes, y tienen que dar ejemplo de otra manera, quiero decir que duplicar las muertes y los casos en tres semanas es una mala señal”, destacó.