Gracias a factores como los avances que se han conseguido dentro del campo médico hoy la esperanza de vida es la más alta de la historia. Las personas cada vez viven más tiempo y aunque en primera instancia es un aspecto positivo también tiene algunas desventajas. Dentro de lo negativo se encuentra un aumento en enfermedades y padecimientos que por lo regular solo se presentan en personas de edad avanzada. En la lista están las demencias como el Alzheimer y lo peor es que el futuro no luce prometedor.
Por lo anterior la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) realizó la conferencia de prensa a distancia titulada “Aduhelm ¿El fin del Alzheimer?” en la que se habló sobre este padecimiento y algunos avances en el tema que se han conseguido.
Avances recién conseguidos
Lo primero que se mencionó es que la reciente aprobación del fármaco experimental Aduhelm para las fases tempranas de la enfermedad de Alzheimer por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) no representa el fin del padecimiento. De hecho apenas es el principio del desarrollo de nuevos medicamentos porque aún no existe cura para ese mal.
La experta María del Carmen Cárdenas Aguayo señaló que actualmente existen de 40 a 50 millones de casos de demencias a escala mundial, pero podrían triplicarse para 2050. De esta manera, los 35 millones de casos de la enfermedad de Alzheimer actuales aumentarán por tres.
Panorama actual en México
Mientras que en México se calcula que hay un millón de casos aunque a la fecha no existe una cifra oficial. Por lo tanto podrían ser más las personas afectadas porque no se tienen contempladas a las que carecen de un diagnóstico médico.
“Hay que ver qué cambios en el estilo de vida, en la alimentación, se han dado y que están favoreciendo su incidencia. En nuestro país, por ejemplo, tenemos una epidemia de diabetes y obesidad, que son factores para desarrollar ese tipo de demencia”.
Mientras que su prevalencia es de 7.3 por ciento en adultos mayores de 60 a 65 años. Los casos genéticos van del uno al cinco por ciento y la mayoría son esporádicos: es decir, se presentan sin un antecedente genético claro.
En tanto que José Luis Delgado Reyes añadió que a mayor edad se incrementa la probabilidad de tener la enfermedad. Entre los mayores de 80 años es de 30 por ciento y si hay factores genéticos, es decir, un familiar de primer grado con el padecimiento aumenta de dos a cuatro veces la posibilidad de presentarla.
“Vemos que la enfermedad es multifactorial, influye el estilo de vida y la presencia de comorbilidades (por ejemplo, la hipertensión arterial puede provocar demencia). Una alimentación y ciclos de vigilia y sueño adecuados, ejercicio y manejo del estrés, ayudan a tener un cerebro más sano”.
Mientras que ambos señalaron que el fármaco Aduhelm va dirigido a las placas neuríticas. Es la primera vez que uno de su tipo no solo sirve para los síntomas sino que podría modificar el desarrollo de la enfermedad, tratando de intervenir en sus fases de desarrollo. Aunque advirtieron que se basa en una hipótesis que todavía está en fase de prueba.