Los médicos, especialistas y el personal humanitario de la organización con presencia a nivel internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) se encuentran bajo la lupa de las autoridades del Gobierno Nacional de Italia, luego de la supuesta colaboración que se presume existe entre los profesionales de la salud que forman parte de la asociación multinacional y las agrupaciones criminales encargadas del traslado ilegal de inmigrantes a Europa.
¿Colusión, racismo o algo más?
Jugend Retter y MSF bajo investigación
Con esto en mente y tomando como eje de referencia el contenido disponible en un artículo publicado por la cadena internacional de noticias Sputnik, que confirmó la información recopilada por la agencia Thompson Reuters, los agentes de la Fiscalía italiana han abierto una carpeta de investigación en contra de las organización humanitarias:
- Jugend Retter
Organización No Gubernamental (ONG) de origen alemán; y, - Médicos Sin Fronteras
La organización multinacional fundada en el año de 1971.
Por la supuesta colaboración de ambas instituciones con agrupaciones encargadas del traslado de inmigrantes irregulares al territorio perteneciente a la Unión Europea. Una práctica que además de ser ilegal en esta región del mundo es mal vista por naciones ortodoxas como Italia y Francia.
De acuerdo con Reuters, la organización Médicos Sin Fronteras se mostró optimista a través de un comunicado donde confirmó que colaborará con la Fiscalía en todo lo conducente para esclarecer el asunto.
La muerte en el norte de África
En este contexto, la organización multinacional Amnistía Internacional (AI) reconoció que el conflicto armado derivado de la inestabilidad política impulsada por Muhamar Gadafi ha tenido como efecto devastador la destrucción, casi por completo, del sistema nacional de salud en Libia, una de las naciones más peligrosas que hay actualmente en el mundo.
En abril, la Organización Mundial de la Salud informó de que el sistema de atención a la salud de Libia había desaparecido casi por completo y en junio calculaba que casi el 60 por ciento de los hospitales públicos de las zonas de conflicto habían cerrado o eran inaccesibles. En octubre, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU calculaba que había 1.3 millones de personas en el país que necesitaban asistencia humanitaria.
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