De acuerdo con el comisionado de Seguros de California, Dave Jones, la farmacéutica AbbVie presuntamente habría sobornado mediante regalos, dinero y servicios gratuitos a varios profesionales de la salud en el estado, esto con el objetivo de aumentar el consumo de su droga Humira. Esta acción, de acuerdo con el funcionario, no sólo constituye una violación a la relación con los pacientes, sino que también aumentó sin escrúpulos los costos de la industria aseguradora local.
A través de una conferencia de prensa, el comisionado acusó a AbbVie de implementar esta estrategia ilegalmente y anunció que ya estaba en proceso una demanda para imponer a la farmacéutica un castigo adecuado por su comportamiento. De acuerdo con el funcionario, la compañía habría apostado con la vida de miles de californianos, incluidos niños.
Humira es un medicamento desarrollado por AbbVie que se comercializa como solución inyectable para aliviar los síntomas de la artritis reumatoide y otras condiciones inflamatorias. Sin embargo, entre sus efectos secundarios destaca una mayor vulnerabilidad a padecer distintos tipos de cáncer, así como la posibilidad de contraer infecciones potencialmente mortales.
Además Jones aseguró que, como consecuencia de las acciones de AbbVie, las aseguradoras locales tendrían que haber pagado más de mil 200 millones de dólares adicionales por prescripciones innecesarias de Humira únicamente entre 2013 y agosto de 2018. Dicho volumen de recursos podría convertir a este caso de fraude de aseguradoras en el más grande en la historia de la dependencia californiana.
La demanda describe que AbbVie habría utilizado comidas, viajes y regalos para modificar los patrones de prescripción de los médicos. Además, la farmacéutica también habría enviado a personal administrativo y de apoyo, principalmente enfermeras, para ayudar a los médicos con sus tareas diarias y, además, bloquear cualquier queja de los pacientes sobre el tratamiento.
En su defensa, AbbVie emitió un comunicado afirmando que estas acusaciones carecen de fundamento y reafirmó que todas sus operaciones con profesionales de la salud están bajo los estándares de la legislación local y federal. Aseguró que las enfermeras que proporciona únicamente están para orientar a los médicos y pacientes sobre el uso de Humira y no reemplazan o interfieren con las operaciones diarias de los centros hospitalarios o consultorios.