A exactamente un año del inicio del actual brote de ébola en la República Democrática del Congo, los resultados han sido devastadores. La situación no luce favorable y en lugar de controlar el problema, parece que cada vez es mayor y se extiende a más ciudades. En parte, por la lenta acción de las autoridades nacionales e internacionales, no se visualiza una solución a mediano plazo.
De acuerdo con estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el actual brote ha causado mil 813 muertes y más de 2 mil 600 contagios confirmados. Es por eso que ya se considera como el segundo más mortal de la historia.
Pero lo que resulta más preocupante es que el ébola ya se extendió a la zona urbana del país africano. Debido al primer caso confirmado fue que la OMS declaró una emergencia de salud pública mundial. Con esto se espera lograr contener el brote, aunque a la fecha no se han obtenido los resultados esperados.
Problema de salud sin control
Como te explicamos previamente, hace unos días se confirmó un segundo contagio en la poblada ciudad de Goma. Pero ahora, los reportes más recientes señalan que existe un tercer caso en el poblado señalado. Se trata de la hija del segundo contagio reportado. De momento ya recibe atención y se le brinda el tratamiento especializado para evitar consecuencias mortales.
A su vez, de forma preventiva el gobierno de Ruanda ordenó el cierre de la frontera con el Congo. La medida forma parte de las acciones preventivas para evitar que el ébola se expanda a otras naciones.
En retrospectiva, a un año del inicio del brote se considera el escenario actual como catastrófico. Las acciones tardías de la OMS para emitir la alerta internacional y las constantes guerrillas internas del país son algunos de los factores que han impedido una solución real contra el grave problema de salud.