De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), hasta un 20 por ciento de los adultos mayores de 60 años experimentan algún tipo de trastorno mental, entre ellos los relacionados con depresión y ansiedad. Muchos de estos problemas están relacionados con la falta de un propósito en sus vidas, ante lo cual el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) ha encontrado una solución creativa.
Florentino Castro López, director general del ISSSTE, recientemente ha anunciado una alianza con la Universidad Autónoma Intercultural de Sinaloa (UAIS) para ofrecer a pensionados y jubilados afiliados al Instituto la oportunidad de estudiar la Licenciatura de Psicología Social Comunitaria a través de un sistema en línea.
A través del Programa de Profesionalización de Adultos Mayores, personas de entre 60 y hasta 84 podrán acceder desde sus hogares a cursos en línea disponibles ocho horas al día, para poder titularse en dos años y medio. La plataforma mediante la que podrán beneficiarse de la iniciativa del ISSSTE está construida específicamente para facilitar la navegación a los usuarios mayores.
Erick Pérez Pérez, director de Prestaciones Económicas, Sociales y Culturales del ISSSTE afirmó que hasta ahora se han inscrito 30 pensionados y jubilados afiliados al Instituto. Cada lunes los adultos mayores también podrán acudir a sesiones presenciales en la Casa del Día Poniente, donde habrá personal de la UAIS que se encargará de resolver sus dudas y recibir asesoría adicional.
Pérez Pérez afirmó que la primera generación de esta licenciatura está conformada íntegramente por adultos mayores que asisten regularmente a la Casa de Día Poniente, propiedad del ISSSTE. Las instalaciones también se utilizaron para que el Instituto Nacional para la Educación de Adultos (INEA) ayudara a pensionados y jubilados a terminar su educación primaria o secundaria.
Entre las materias que cursarán los adultos mayores afiliados al ISSSTE están conducta individual y social, así como vinculación comunitaria, con el fin de convertirlos en profesionistas competentes en el análisis de la calidad de vida de la población. Se espera que, tras terminar su carrera, estos pensionados y jubilados puedan participar en proyectos de desarrollo en sus localidades