De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), hasta 2015 existían 7.65 millones de mexicanos que sufrían de algún tipo de discapacidad, siendo la ceguera la segunda más recurrente al afectar a poco más de 2 millones de personas. Afortunadamente para quienes padecen dicha discapacidad, si algo ha enseñado la tecnología aplicada a la Medicina es que uno de los principales objetivos es ayudar a mejorar la calidad de vida de la población.
En este sentido, lo que nació como una noble acción ahora se ha convertido en una novedosa alternativa que podría beneficiar a millones de personas de todo el mundo con alguna discapacidad visual. En este caso, un grupo de médicos del Instituto Oulton (IO), ubicado en Argentina, propuso la creación de ecografías en 3D para las personas invidentes que se encontraban a punto de convertirse en padres y que de esta manera pudieran conocer de la manera más precisa posible el rostro de sus bebés.
De esta manera, lo que realizaron los médicos fue tomar una ecografía de la semana 29 de gestación en la que se podían ver de manera concreta los rasgos faciales del producto y acudieron a una imprenta para poder una versión tridimensional de la impresión.
En ese sentido, los médicos afirmaron que su idea nació a raíz de que las parejas de invidentes sólo pueden sentir los latidos del bebé durante la etapa del embarazo, pero jamás podían tener una idea clara de los rasgos faciales que tendría su futuro hijo, ante lo cual la idea de las ecografías 3D podría convertirse en una alternativa recurrente debido a que el IO ha especificado que planean emplear esta técnica con más parejas que se encuentren en la misma situación.