Pese a que la relación del hombre con el perro data de miles de años en el pasado, durante tiempos recientes se ha observado un amor desmedido hacia los caninos hasta el grado de tratarlos como si fueran los verdaderos hijos humanos de las personas, lo cual no es del todo positivo porque algunos especialistas consideran que esto puede generar daños en la salud mental.
Acerca de este punto, Moisés Heiblum, académico de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) afirmó que el fenómeno conocido como perrhijo se debe tratar con cuidado porque puede ser el inicio de un trastorno mental.
Para algunas personas puede ser algo natural o sin importancia pero la realidad es que llegar a extremos de dormir con el perro, gastar más dinero en él que en uno mismo, comprarle ropa, publicar fotografía de la mascota en redes sociales y crear perfiles en redes sociales para ellos son algunas de las señales de alerta que indican que se padece de un trastorno psicológico.
Por lo anterior, es necesario que le adviertas a tus pacientes de este problema porque el amor desmedido hacia las mascotas puede provocar una dependencia enfermiza que afecta tanto al dueño como al canino.
Por otra parte, es necesario recordar que el papel de animales como los perros dentro de la salud es muy importante y eso se ha visto en programas para detectar infecciones intrahospitalarias en Canadá o que gracias a su compañía pueden ayudar a pacientes que sufren de enfermedades terminales, pero siempre debe existir un límite para evitar cualquier tipo de trastorno.