Cada 23 de mayo se conmemora el Día Internacional del Estudiante, una efeméride que tiene por objetivo el recordar la época por la que atravesamos todos los profesionistas y que representa el período de vida en el que se acumulan todos los conocimientos que aplicaremos durante el resto de la vida.
A propósito de esta celebración, es momento de que recuerdes tu época de estudiante y, pese a lo complicado y exhaustivo que pudo haber sido el tener que atravesar tantos años en la facultad, te des cuenta (una vez más) que los resultados bien valieron la pena el esfuerzo y tiempo invertidos.
En primera instancia, lo mejor de estudiar Medicina es que se trata de una profesión que no sólo te permitirá tener un sustento sino que además tendrás la oportunidad de salvar vidas cada día, por lo que se trata de una de las profesiones de mayor importancia y que, sin importar los avances de la tecnología, jamás será remplazada.
De igual forma, al ser la Medicina una carrera tan compleja, después de concluir con tu formación tendrás conocimientos de distintas áreas, por lo que nunca te faltará un tema de conversación en pláticas o reuniones con tu familia o con tus propios pacientes ya en el plano profesional.
También se trata de una de las carreras con mayor prestigio entre la sociedad, por lo que sin importar el lugar al que vayas, siempre serás bien visto por ser un médico y haber enfocado tus estudios en atender las necesidades de salud de tus pacientes.
Y en tu caso, visto en retrospectiva, ¿qué fue lo que más te agradó de estudiar Medicina?