Durante los últimos años se ha registrado un preocupante incremento en el número de suicidios que se cometen alrededor del planeta. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que anualmente 800 mil personas deciden terminar con su vida de esta forma, siendo la segunda causa de muerte entre la población de 15 a 29 años.
Si bien el suicidio se presenta en todos los niveles socioeconómicos, en todas las edades y razas, en Estados Unidos se ha detectado un fenómeno bastante particular, siendo los médicos quienes muestran la mayor tasa de suicidio entre todas las profesiones, la cual inclusive es del doble que la del resto de profesionistas.
Lo anterior fue declarado por Deepika Tanwar, investigador del Hospital Central de Nueva York, quien encabezó un trabajo que concluyó que entre 28 y 40 de cada 100 mil médicos de Estados Unidos cometen suicidio cada año, mientras que el promedio general de la población es de 12.3 suicidios por cada 100 mil habitantes.
Los médicos que mueren por suicido a menudo presentan un cuadro de depresión no tratada o insuficientemente tratada, aunque también pueden padecer algún otro tipo de enfermedades mentales. Es muy sorprendente que la tasa de suicidios sea más alta entre los profesionales médicos que entre los militares, por ejemplo.
Aunque la causa más común del suicidio suele ser la depresión, en el caso particular de los médicos se agregan otros factores como el estrés constante que padecen a diario por su profesión, además del síndrome de Burnout y el perfeccionismo que buscan alcanzar con sus pacientes.
Con todos estos antecedentes, recuerda que aunque tu objetivo central es atender los problemas de salud de tus pacientes, la mejor forma de tratarlos es si tú pones el ejemplo y jamás descuidad tu propia integridad física y mental.