Hace algunos días se dio a conocer la existencia de una “bacteria pesadilla”, la cual durante 2017 registró 221 casos en Estados Unidos y que se caracteriza por la presencia de gérmenes considerados inusuales y peligrosos, conocidos por su resistencia a los antibióticos, además que 1 de cada 4 muestras de gérmenes resistentes analizados contiene un tipo de gen que les posibilita transmitir esta resistencia a otras bacterias.
Ante este panorama, los especialistas han comenzado a cuestionarse sobre el origen de esta bacteria y, a pesar de que la resistencia bacteriana y la automedicación de los pacientes han influido en su desarrollo, una investigación de la publicación Science Alert profundizó al respecto.
Con base en el trabajo se determinó que estas bacterias se originaron en las granjas de cerdos de China en 2005, cuando los animales fueron medicados en exceso. Fue a partir de este fenómeno que las bacterias adquirieron una resistencia nunca antes vista hacia los antibióticos y en la actualidad los científicos han detectado que son resistentes frente a la colistina, uno de los antibióticos más potentes que existen.
De esta forma, la “bacteria pesadilla” ya se ha propagado por diversos países del mundo y hasta el momento se ha notificado su presencia en al menos 30 países, aunque el más afectado es Estados Unidos y de acuerdo con el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), durante el año pasado 2 millones de estadounidenses se vieron afectados, de los cuales 23 mil fallecieron.
Por último, la magnitud del problema radica en que previamente la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer que se tiene previsto que para el año 2050 la resistencia bacteriana sea la primera causa de muerte a nivel global.