Autoridades de la Fundación Española de Hematología y Hemoterapia (FEHH) dieron a conocer su postura sobre la incorporación de nuevas técnicas eficaces asociadas a la gestión clínica para el desarrollo de la especialidad.
Objetivo: alcanzar un mayor grado de profesionalización
El Dr. Pedro Sánchez Godoy, médico especialista y jefe del Servicio de Hematología del Hospital “Severo Ochoa” (HSO) de Madrid, detalló que el impedimento para una adecuada gestión clínica recae en el interés de la administración sanitaria y las decisiones políticas que entorpecen el desarrollo de los especialistas.
El desarrollo de la gestión clínica en España requiere una decisión política para poder ponerla en práctica, ya que conlleva importantes cambios organizativos en la atención sanitaria. No se puede hablar de gestión clínica en tanto los políticos no se convenzan de que este país, como muchos otros, necesita modernizarse y se lleguen a poner de acuerdo para poder salir de la parálisis en que nos encontramos inmersos.
¿Actualizar la licenciatura en Medicina?
En esa tesitura, el hematólogo explicó al portal Redacción Médica que la posibilidad de llevar los postulados de una buena gestión clínica podrían ser introducidos en la Licenciatura para Médico Cirujano. Una mecanismo que no sólo beneficiaría la práctica médica, sino que, además, lograría un mayor grado de profesionalización de los médicos especialistas.
A nivel profesional, la tienen que poner en práctica –con mayor o menor autonomía– los responsables de los servicios y unidades de los hospitales”. Además, debería contemplarse de alguna forma su impartición durante la licenciatura de Medicina. Los médicos asistenciales manejan muchos recursos para poder realizar su actividad diaria, con lo que es recomendable que tengan conocimientos de gestión para una administración eficaz de dichos recursos.
Más dinero, bien administrado
El debate inaugurado por el Dr. Sánchez Godoy es pertinente para los países con recursos escasos como en México, ya que, como ha documentado Saludiario, una mala administración del recurso económico pude derivar en problemas que pueden detentar el mismo sistema de salud pública. Ejemplo de ello es el caso de los Estados Unidos, que a pesar de ser el país que más destina dinero al sector salud, es la nación con el peor sistema de salud de todo el mundo.
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