De acuerdo con datos del Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez (HPFBA), el trastorno afectivo bipolar se ubicó dentro de los cinco problemas de salud mental más comunes en consulta externa de este nosocomio, donde representa el 15 por ciento de las 34 mil 300 consultas que se brindaron ese año.
Al respecto, el Dr. José Ibarreche Beltrán, informó que trastorno afectivo bipolar se colocó en el cuarto lugar después de la esquizofrenia, trastornos de ansiedad y personalidad. El especialista detalló que dicha enfermedad tiene una prevalencia en México de entre 1 y 3 por ciento.
El médico especialista Ibarreche Beltrán, explicó que el trastorno afectivo bipolar se caracteriza por la presencia de alteraciones en el estado de ánimo que se elevan por encima del rango estándar.
Las personas que padecen este trastorno pueden atravesar por episodios maniacos (exaltación, autoestima muy elevada, hostilidad, bajo control de temperamento, etcétera) y episodios depresivos (baja autoestima, abatimiento, desesperanza, sentimientos de culpa, problemas de sueño, concentración y alimentación).
Asimismo, el médico jefe de consulta externa del HPFBA, indicó que en cuanto al diagnóstico, el paciente debe presentar los mencionados síntomas al menos por un periodo de dos semanas. Pero si la persona manifiesta alucinaciones, ideas de grandeza y delirios, el diagnóstico se realiza sin la condicionante de tiempo.
Existen dos tipos de bipolaridad, en el primero, los pacientes presentan episodios maniacos y depresivos de manera alternada o mixta y ocurre por igual en hombres como en mujeres. El tipo 2 tiene como principal característica que se presenta más en mujeres con episodios hipomaniacos, es decir, el estado de exaltación supera el rango estándar, pero no es tan excesivo como un episodio maniaco”, explica el Dr. José Ibarreche Beltrán.
Abundó que el trastorno afectivo bipolar puede ser ocasionado por predisposición genética, abuso de sustancias en la adolescencia y factores biológicos y sociales.
La falta de tratamiento puede ocasionar deterioro cognitivo y atrofia cerebral, lo que pone en riesgo la vida de las personas ya que en los episodios maniacos o depresivos pueden tratar de suicidarse o realizar otras actividades riesgosas. Por eso es recomendable que los familiares o el mismo paciente solicite ayuda de un profesional psiquiátrico para que le brinde el tratamiento adecuado, que en general consta de medicamentos estabilizadores del estado de ánimo y psicoeducación.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Salud Mental y a la Comisión Nacional contra las Adicciones, México se coloca en el cuarto lugar en América Latina en índice de suicidios, motivo por el cual en las últimas tres décadas la tasa de mortalidad pasó de 2 a 8 por cada 100 mil habitantes. Según este mismo informe, 31 por ciento de los pacientes con trastornos mentales permanece 10 años o más en un hospital psiquiátrico.