Con la finalidad de colocarse a la vanguardia en materia de diagnóstico y tratamiento de enfermedades cardiovasculares, la UNAM y el Instituto Nacional de Cardiología (INCAR), trabajan en conjunto en la complementación de técnicas avanzadas de investigación básica con los equipos de diagnóstico no invasivo, para estudiar a pacientes con enfermedades del corazón congénitas o adquiridas.
Así lo dio a conocer el Dr. Jesús Vargas Barrón, responsable de la dirección de Investigación del INCAR, quien mencionó que si bien ya existen unidades de trabajo parecidas en otros institutos nacionales de salud, las investigaciones que se realizan en esos lugares sólo se limitan a los protocolos, y son empleadas para el diagnóstico y tratamiento de personas con padecimientos del corazón.
Las investigaciones que realizamos en conjunto la UNAM y el INCAR están centradas en más de 10 proyectos traslacionales vinculados con padecimientos como hipertensión, infarto agudo al miocardio en mujeres pre y pos menopáusicas, alteración de los lípidos e insuficiencia renal.
El especialista subrayó que la unidad a su cargo cuenta con cinco laboratorios de ciencias básicas y un sexto para el empleo de diagnósticos no invasivos, el cual está equipado con electrocardiografía y un sistema de monitoreo de 24 horas para supervisar los signos cardiacos y estudios de sueño.
Jesús Vargas Barrón informó que las enfermedades cardiovasculares representa un grave problema de salud pública en México por su elevada morbi-mortalidad.
Con esta unidad expandiremos el conocimiento de estos padecimientos para proponer medidas de diagnóstico o tratamientos que permitan mejorar la salud cardiovascular de los mexicanos.
A propósito de este problema de salud, un reporte de la Asociación Nacional de Cardiólogos del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ANCISSSTE), dio a conocer que poco más del 50 por ciento de las muertes registradas en nuestro país se deben a complicaciones asociadas a enfermedades cardiacas.
Por otra parte, a través del Programa Código Infarto, el IMSS dio a conocer que en México los infartos suelen ser más frecuentes en hombres que en mujeres (76.5 por ciento son varones y el 23.5 por ciento, mujeres).