Convertirte en un verdadero médico emprendedor y hacerte cargo de las finanzas de tu consultorio no es un asunto sencillo de llevar a cabo.
Ser tu propio jefe implica una serie de responsabilidades que repercuten en una dinámica de costo-beneficio. De esta forma, para que tu empresa de salud crezca, uno de los aspectos más importantes es mantener bajo control las finanzas de tu consultorio, aspecto que puedes lograr si tomas en cuenta los siguientes consejos:
Ten un mayor control de tus gastos
- La gestión de gastos es una de las primeras cosas que debes cuidar en tu empresa de salud. Lleva un registro de todas las compras que haces, sin importar si éstas son muy pequeñas. Convierte este ejercicio en un hábito para que puedas identificar en qué gastas tu dinero y de esta forma, evitar compras innecesarias.
Aprende a presupuestar
- Los presupuestos te ayudarán a emplear la información del monitoreo de tus gastos para que puedas desarrollar planes financieros a futuro. Aunque pueda sonar muy complicado, no lo es. Puedes basarte en esta fórmula: 50 por ciento para necesidades de tu empresa de salud, 30 por ciento para ahorros y 20 por ciento para distracciones.
Ahorro-ganancias
- Si aprendieras a convertir tus ahorros en ganancias, seguramente estarías más motivado para ahorrar cada centavo que ingrese a tu empresa de salud, así que evita gastar más de lo que ganas, de lo contrario, tu consultorio no durará mucho tiempo.
Conoce cuál es tu situación financiera
- Existen varias maneras de saber dónde exactamente se encuentra parada tu empresa de salud. Una manera sencilla de hacerlo es usar un software que te ayude a monitorear tus gastos. Sólo debes generar una hoja de ingresos y una más con tus ganancias y pérdidas.