Una nueva investigación dio a conocer que amamantar al menos durante los dos primeros meses de vida del bebé disminuiría el riesgo de muerte súbita hasta en un 40%.
De acuerdo con el estudio publicado en Pediatrics, los resultados comprobaron que si la lactancia se extiende entre los cuatro y los seis meses de edad, la muerte súbita se reduciría hasta un 60%, cifra que puede alcanzar el 64% cuando la lactancia rebasa el medio año.
“Si ésta no llega siquiera a los dos meses, el bebé no tendrá ninguna clase de protección”, dijeron los investigadores del American Academy of Pediatrics.
Este colegio de médicos y la Organización Mundial de la Salud (OMS), han recomendado por diferentes razones de salud amamantar al menos hasta los seis meses y seguir con la lactancia materna junto con otros alimentos que ayuden a fortalecer la alimentación hasta los dos años o más, mientras la madre y el bebé lo deseen .
Cabe mencionar que no se trata del primer estudio que relaciona el amamantamiento como una medida de protección frente a la muerte súbita del lactante, un problema que aún es de origen desconocido y que pudo haber sido el causante de la muerte de 3,700 bebés en Estados Unidos en 2015, una de las naciones con los más bajos niveles de lactancia materna a nivel mundial.