Médicos y especialistas del Servicio de Traumatología del Hospital Universitario HM de Madrid (HUHMM), uno de los centros especializados en la atención del paciente geriátrico más importantes que hay en todo el territorio español, señalan que la adecuada implementación, desarrollo y seguimiento de 3 claves específicas son pilares en el retraso de los efectos degenerativos del envejecimiento.
En 40 años habrá más de 2 mil millones de adultos mayores
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la población a escala global se destaca por ser cada vez más longeva en términos de edad, ya que tan sólo en el periodo comprendido entre los años 2000 y 2050:
La proporción de los habitantes del planeta mayores de 60 años se duplicará, pasando del 11 por ciento (2000) a un 22 por ciento (2050). En números absolutos, este grupo de edad pasará de 605 millones a 2 mil millones en el transcurso de medio siglo.
Con esto en mente y tomando como base la realidad que se avecina no sólo en México, sino, en todo el mundo, el Dr. José María Pallares, coordinador del área de Medicina Interna del Hospital Universitario HM de Madrid, es consciente de que los médicos de primer contacto, generales y de cabecera deben de procurar la implementación de las siguientes líneas de tratamiento geriátrico:
Dieta equilibrada
La dieta en la edad adulta debe ser baja en carbohidratos y grasas, siendo importante también las cantidades. Es necesario tener presente que cualquier alimento va a aportar unas calorías, y estas están en relación con la cantidad del alimento.
- La dieta mediterránea puede ser una excelente opción.
Fortalecimiento de la cultura del chequeo
Sobre esta línea discursiva, el Dr. Rafael Zarzoso, jefe del Servicio de Traumatología del Hospital Universitario HM Madrid, señala que esta condición no es exclusiva del paciente geriátrico; sin embargo, debido a las condiciones normales del envejecimiento, es una tarea que se debe acentuar en el paciente adulto mayor.
- Debe consistir en una analítica completa, un electrocardiograma, presión arterial y controlar el peso. En pacientes varones revisión por urólogo para despistar problemas prostáticos así como las mujeres visitar al ginecólogo para revisión aparato genital y de las mamas. En las mujeres además, cada 2 años es recomendable la realización de una densitometría ósea para valorar presencia de osteopenia u osteoporosis y en cada caso poner tratamiento adecuado.
Activación física
- Permanecer durante horas sin movilidad es lo peor que puede hacerse. Actividades como yoga, taichí, pilates o natación también pueden ser muy beneficiosas puesto que potencian la flexibilidad y el equilibrio y contribuyen a las relaciones sociales, también muy importantes en esta etapa de la vida para evitar las consecuencias del envejecimiento.
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