El cáncer de mama, además de ser uno de los de mayor incidencia a nivel mundial, también es uno de los más complicados de tratar debido a la agresividad de la enfermedad. Incluso quienes logran combatir efectivamente el padecimiento, en muchas ocasiones deben vivir con los dañinos efectos secundarios provocados por los tratamientos que se encuentran disponibles en la actualidad.
Fue a partir de eso que investigadores españoles de la Universidad de Granada (UGr) y la Universidad de Málaga (Uma) se dieron a la tarea de desarrollar un nuevo tratamiento menos tóxico para las pacientes con cáncer de mama en etapas avanzadas.
Los investigadores tomaron como base el fármaco Paclitaxel, que es uno de los más utilizados por los médicos en la actualidad para el tratamientos de pacientes con este tipo de cáncer por su alta efectividad, pero por desgracia causa un intenso dolor y contiene una fuerte carga tóxica, lo que en muchas ocasiones provoca el abandono de las mujeres que se someten a este tratamiento.
En ese sentido, los científicos descubrieron que el uso de unos microgeles huecos resulta en una efectiva forma de transportar el Paclitaxel sin la necesidad de solventes tóxicos.
Por su parte, el Dr. José Carlos Prados Salazar, miembro del Centro de Investigación Biomédica (CIBM) de la UG, explicó la forma de actuar de este nuevo tratamiento.
Esta forma de uso del fármaco aumenta, además, su efectividad antotumoral y permite que penetre de una manera más eficaz en la masa tumoral. La versatilidad de este polímero permitirá dirigir el fármaco de forma más precisa frente a las células tumorales y su biocompatibilidad garantiza que puede ser usado in vitro, investigación que se está llevando a cabo en estos momentos.