Ser médico implica una fuerte responsabilidad porque la salud de los pacientes está en tus manos. Cada persona que acude a tu consultorio confía en ti para que la ayudes a solucionar su enfermedad. Con esto vas a conseguir su recuperación integral en el menor tiempo posible. Pero el problema es que un proceso que parece muy simple en realidad es muy exigente. Eso deriva en jornadas de trabajo demasiado exigentes porque siempre hay muchas actividades por realizar.
Por lo anterior, es frecuente que los médicos desarrollen altos niveles de estrés. Cuando eso ocurre se genera un círculo vicioso porque ellos son los primeros afectados pero no los únicos. Al sentirse presionados su rendimiento es menor e inclusive tienen más probabilidades de cometer errores. Por lo mismo, los pacientes también están en riesgo.
Para que eso no te ocurra a ti te compartimos algunos consejos que te serán de ayuda dentro del consultorio. Recuerda que para poder hacer sentir bien a los demás primero te debes de sentir en plenitud tú mismo.
Toma breves descansos durante todo el día
La mayoría de las ocasiones el cansancio mental se genera porque tienes demasiadas actividades por hacer y eso te consume. Es bueno que seas trabajador pero al final eres un humano y no una máquina. Por lo tanto es conveniente que no te exijas demasiado porque tu salud es igual de importante que la de los pacientes.
De esta forma, lo mejor que puedes hacer para tener un buen rendimiento es tomar breves descanso a lo largo de tu jornada diaria. Lo ideal es que descanses cinco minutos por cada dos horas y puedes hacer durante el cambio de consultas. Cuando eso ocurra aprovecha para relajar tu mente y estirar el cuerpo.
Delega responsabilidades
Otro error frecuente de los médicos es querer hacer todo sin la ayuda de los demás. Recuerda que tú eres el líder del consultorio pero no el único trabajador. Si estás rodeado de personas capacitadas entonces confía en cada uno de tus colaboradores y deja que cada uno haga una actividad distinta. La suma de todos los esfuerzos individuales será la encargada de conseguir buenos resultados grupales.
Aprovecha la tecnología
En la actualidad la tecnología se ha convertido en una poderosa herramienta y tú la tienes a tu alcance así que no la desaproveches. Al aplicarla dentro de tu consultorio vas a recibir varios beneficios como una mayor precisión y una reducción en tus labores. Eso implica que seas más productivo y también te ayude a disminuir los niveles de estrés.
Algo bastante sencillo pero que genera grandes cambios es utilizar expedientes clínicos electrónicos. De esta forma vas a lograr un ahorro considerable porque la información de cada paciente se captura de manera automática. Además también te puedes despedir de todos los archiveros que suelen ocupar un espacio considerable en el consultorio. Ahora lo único que necesitas es una memoria para tener un resguardo de la información.
Establece metas razonables
En muchas ocasiones los médicos viven con estrés constante porque tienen metas a largo plazo que quieren cumplir al instante. Eso les genera una presión de la que no se pueden desprender y les causa daños a nivel mental porque no se sientes capacitados o piensan que no son posibles de conseguir algo. La falla no es el objetivo sino el plazo en el que se quiere conseguir.
Por lo anterior, lo ideal es que siempre te establezcas metas a corto plazo y que sean razonables. En lugar de tener una muy grande en un año mejor piensa en una para cada mes. De esta manera, después de cumplir 12 ya habrás conseguido la primera que habías establecido.
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