Aprobado el dictamen por cual se reformaron diversas disposiciones en la norma uruguaya a finales del año 2013 por el entonces presidente José Mujica, la venta de la marihuana se ha constituido a partir de un proceso de larga discusión entre los diferentes sectores de la población en esta parte de América Latina. Hoy, es una realidad que cada vez se ve más próxima para los pacientes que requieran de su utilización.
Con esto en mente y derivado de la información disponible en un artículo publicado por la cadena de noticias El Público, durante los primeros días de este mes de mayo se terminó el desarrollo del sistema para el acceso legal de la marihuana, con la regulación de su venta en farmacias especializadas.
De acuerdo con la legislación aprobada, a partir de julio el costo de la marihuana será de 1.3 dólares el gramo con la posibilidad de adquirir hasta 10 gramos semanalmente a través de la compra en espacios avalados y registrados por el gobierno de Uruguay.
En el primer día de apertura se apuntaron algo menos de 600 personas, que se sumaron a los seis mil 617 autocultivadores ya censados que plantan la marihuana a domicilio y a los dos mil 300 integrantes de los 51 clubes canábicos (de un máximo de 45 socios cada uno) hoy en funcionamiento.
Los clubes cooperativos, las farmacias y el autocultivo son las tres vías por la cuales los uruguayos pueden acceder al consumo de marihuana. Los usuarios de la sustancia pueden elegir una de las tres opciones, pero pueden alternar de una a otra, gracias al registro clínico que se tiene sobre cada paciente.
El Estado autorizó únicamente a dos empresas privadas para cultivar la marihuana y venderla en farmacias. Una comprobada eficacia terapéutica.
La marihuana en México
Mientras esto ocurre en el pequeño Uruguay, México también se ha sumado al debate de la despenalización que corresponde a una segunda regulación de la marihuana. La primera la ilegalizó desde el año de 1961 a nivel mundial; y, la segunda, esta, pretende hacerla parte del sistema de salud en la república.
Sin embargo, el panorama de legalización similar al de territorio uruguayo es todavía lejano:
A mediados de 2016, el H. Congreso de la Unión comenzó a darle un tratamiento a un proyecto de regulación que despenalice el uso terapéutico de la marihuana, bajo el control de la Secretaría de Salud (SSa), la producción a cargo de instituciones diseñadas por el Estado, posesión y comercialización de marihuana únicamente con fines médicos y científicos y prevé la capacitación específica de profesionales de la salud. La medida fue aprobada por la Cámara de Diputados el 28 de abril pasado.
Imagen: Bigstock