El pasado martes, un comando armado ingresó por la fuerza al Hospital Básico Comunitario de Tixtla, Guerrero, exigiendo atención médica para una persona que presentaba heridas por arma de fuego.
Previamente, según información proporcionada por la Secretaría de Seguridad Pública de aquella entidad, dicho grupo delictivo secuestró al comandante de la Policía Municipal de Tixtla después de un intercambio de disparos con agentes, quienes posteriormente huyeron hacia la salida Tixtla-Chilapa.
Más tarde, el mismo comando ingresó al citado nosocomio a bordo de un auto tipo Polo, color gris, exigiendo atención médica para uno de sus integrantes. Inmediatamente algunos médicos fueron obligados por los delincuentes a abordar la ambulancia 1146 para atender al herido, alejándose del hospital hacia rumbo desconocido.
Por estos acontecimientos, personal de la policía de Chilpancingo, corporaciones estatales y elementos del ejército mexicano, iniciaron un operativo de búsqueda por tierra y aire para encontrar y rescatar al mando policial, así como al personal médico que fue privado de su libertad, además de dar con el paradero de los responsables, quienes presuntamente huyeron al municipio de Mochitlán.
La Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero, señaló que momentos después la policía estatal encontró la ambulancia, mas no así a los profesionales de la salud, quienes presuntamente fueron trasladados a otro vehículo del cual se desconoce su paradero.
Minutos después, la policía y el ejército encontraron una camioneta Mitsubishi color blanco con placas de circulación HD3-00-46 abandonada en un camino de terracería. En su interior los elementos hallaron chalecos antibalas, cartucheras y dos uniformes color azul marino con la leyenda “policía municipal”.
Hasta el momento se desconoce el paradero de los médicos por lo que el despliegue policial continúa.