Thierry Blancpain y Pieter Pelgrims, son los nombres de dos amigos que en el año 2010 decidieron dejar de quejarse por “tonterías”. El éxito de su pequeño experimento social tuvo como consecuencia que a la iniciativa se le sumaran cada vez más personas con la intención de formar parte de los resultados que, según el par, son bastante benéficos para la salud integral.

En esa tesitura y de acuerdo con la información contenida en un artículo publicado por el diario internacional El País, los amigos se sintieron más felices en su actuar cotidiano, luego de su ligero proceso experimental. Razón que los motivó a realizarlo el año siguiente, pero, ahora, con una invitación abierta a sus amigos para compartir los beneficios.

Pieter y yo llevamos siendo amigos desde hace 10 años y hemos trabajado juntos en muchos proyectos y en invierno de 2010, tuvimos la idea de dejar de quejarnos por un mes. Como después nos sentimos más felices, decidimos repetir al año siguiente y el siguiente.

Por otro lado, Thierrry Blancpain, explicó que no es malo quejarse. Pero que si es necesario dejar de hacerlo por todo. De esta manera, destacó que muchos acontecimientos vistos desde perspectiva no merecen mayor importancia porque ello representaría una perdida considerable de energía y tiempo.

La lluvia, el bebé que llora en el restaurante, el jefe que te hace estar una hora más en la oficina, el autobús que perdiste para ir al trabajo… no. Si tenemos comida, casa, familia, amigos… ¿no deberíamos ser felices?

Sobre esa línea discursiva el grupo de amigos dio cuenta clara de que una manera muy adecuada para reducir el efecto negativo de una queja es transformar esa condición en una posibilidad o sugerencia.

Queja —> Sugerencia

Por ejemplo:

Si alguien viene y me cuenta que alguna pequeña cosa negativa sobre su trabajo, le pregunto si no cree que su jefe horrible es señal de que debe buscar un nuevo empleo.

Thierry Blancpain y Pieter Pelgrims eligieron el mes de febrero para “dejar de quejarse”, aunque señalan que se puede hacer en cualquier mes del año, donde sea que uno se encuentre. Sólo hace falta ponerlo en práctica.

¿Te unes al reto?

Imagen: Bigstock