Si hay una profesión en la que hay que tomar numerosas decisiones (algunas incluso a vida o muerte) es la de médico. Pero, ¿sabes como se produce la toma de decisiones en el cerebro? Básicamente, se puede decir que él toma las decisiones que nos ayudan a sobrevivir, a adaptarnos, crecer, evolucionar y alcanzar nuestra plenitud.

Tal y como ha explicado Mario Alonso Puig, médico especialista en cirugía general y aparato digestivo y chairman del Center for Health, Well-Being and Hapiness del IE University, “se debe hablar de la interacción mente-cerebro porque la mente no se puede explicar solo como un proceso que emerge del cerebro, sino que es un proceso informativo tremendo donde interviene el cuerpo, el contexto. En realidad, hay muchos elementos que de alguna manera crean esa red de información que conocemos como mente”.

El problema para muchas personas es cómo funciona todo dentro de su cerebro

Él mismo ha expresado que “hay muchas personas que sufren, a veces de forma callada, a entender que no hay nada en ellas que sea defectuoso, que no son seres defectuosos sino seres capaces dignos de ser felices y amados, y de prosperar en la vida a todos los niveles”.

El problema no está en quiénes son ellos, sino en qué está funcionando dentro de ello, para qué y de qué forma, para que no estén experimentando realmente la grandeza que hay en ellos. Lo que pasa es que el cerebro siempre tiene en cuenta tres objetivos: sobrevivir de forma adecuada, adaptarse y el poder crecer y evolucionar. El principal problema es que la mente genera muchas distorsiones en el funcionamiento del cerebro y, por eso, con frecuencia, vivimos una contradicción interior, con un impacto grande en nuestra salud y en la relación con las personas.

Para comprender la toma de decisiones en el cerebro, habría que saber que los dos hemisferios entran en conflicto y el izquierdo intenta suprimir gran parte de lo que le llega del cerebro y cómo el hemisferio derecho intenta encontrar su camino para que la persona haga algo importante para su desarrollo. Esto sirve para comprender por qué una persona, por ejemplo, no sabe sobrellevar su éxito y comienza a sentir ansiedad o por qué a veces nos vemos como personas poco correctas, inadecuadas o malas.

Hay personas que sí logran conseguir la “paz interior”

El experto ha señalado que “el resultado global de ese cerebro es mucho menor del que podría dar. Es algo que nos pasa a todos, aunque depende mucho del nivel de madurez, de la consciencia de una persona…Hay personas que tienen un nivel tan brutal que viven en un estado constante de amargura, de ansiedad, de depresión y de sospecha para todo, mientras que otras no están en ese nivel pero sí arrastran un lastre poderoso que les impide disfrutar del nivel de bienestar o felicidad.

En cambio, hay personas que sí han conseguido integrar los diferentes sistemas operativos del cerebro y gozan de una gran serenidad mental, la llamada “paz interior”, por la que permanecen estables en momentos de excepcional dificultad, gozan de alegría sea cual sea la circunstancia, así como de gran creatividad.

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