La ciudad de Toronto, Canadá, alberga el Humber River Hospital, el primer hospital totalmente digital.
Dicha institución es considerada como tal debido a que posee una gran cantidad de equipo médico de la más avanzada tecnología que existe en la actualidad. Además, el Humber River Hospital aprovecha al máximo la inteligencia artificial al emplear robots para una amplia gama de funciones.
Y por si fuera poco, este hospital se encuentra a la vanguardia ya que utiliza los mejores dispositivos digitales para facilitar la comunicación entre los pacientes y profesionales de la salud.
Un hospital preocupado por la innovación
La gran extensión de sus instalaciones permite albergar más de 656 camas lo cual ha supuesto una inversión de 1,700 millones de dólares estadounidenses. Otro aspecto que llama la atención de este hospital es que el área de radiología trabaja con tres robots que se desplazan alrededor del paciente para conseguir imágenes de rayos X, en vez de que sean las personas las que se coloquen en distintas posiciones para las proyecciones.
El Humber River Hospital pareciera sacado de una película de ciencia ficción, ya que por los pasillo de este recinto de salud pueden verse robots automatizados transportando materiales y suministros al personal médico que lo requiere. Estos robots son capaces de entrar a los elevadores para realizar la distribución.
Las habitaciones de los pacientes también son de admirarse, pues un teléfono en la cabecera del paciente hace las veces de escáner de código de barras, lo que permite al médico o al personal de enfermería introducir registros del paciente al historial clínico electrónico, lo que también permite a manipulación de medicamentos de forma segura.
Los pacientes cuentan con una pantalla con la cual puede acceder a Skype para hacer videoconferencias con sus médicos, leer libros e incluso para hacer pedidos de comida. Casi todas las habitaciones son privadas para garantizar la comodidad de los pacientes y sus familiares.
Definitivamente, este hospital futurista puede servir de modelo para otras instalaciones en el futuro.