Como bien sabes, muchas enfermedades son asintomáticas como los problemas cardiacos o enfermedades cardiovasculares.

Esta clase de padecimientos ha dado pie a una serie de mitos que la gente ha aceptado como ciertos  pero que bien valdrían la pena que aclares en tu consultorio médico. Aquí algunos de los mitos más comunes que giran alrededor del infarto:

Los altos niveles de estrés provocan infarto

Si bien el estrés puede manifestarse físicamente y podría ser el detonante, no necesariamente lo provoca. Tus pacientes deben saber que un infarto por lo general es causado por una arteriosclerosis y no por el estrés en el sentido estricto. Un estudio realizado por el Centro de Investigación del Corazón Framingham, señala que los factores más comunes son: el tabaquismo, el sobrepeso, el colesterol elevado, la hipertensión y la falta de actividad física.

Sólo las personas de edad avanzada sufren infartos

Es otros de los mitos más extendidos entre las personas, por lo que es aconsejable que tus pacientes sepan que no dependen de la edad, sino de las fallas cardiacas y los factores hereditarios. Un estudio publicado en la American Heart Association señala que una gran parte de los infartos en niños y adolescentes son causados por un factor hereditario. También, un alto porcentaje de esos niños padecen problemas cardiovasculares debido a una enfermedad congénita.

Las personas jóvenes tienen menos posibilidades de fallecer por un infarto

La juventud no puede proteger a las personas. Varias investigaciones han dado a conocer una alta incidencia de hipertensión en personas jóvenes, por lo que esta enfermedad es más común actualmente en este sector poblacional.

El dolor de pecho es síntoma de infarto

Muchas personas creen que un dolor en el pecho es sinónimo de infarto. Como médico sabes que los síntomas de un infarto pueden ser diferentes en todas las personas. Algunas veces no hay dolor agudo y las personas lo pueden manifestar con dificultad para respirar, mareos y náuseas.

Si tienes pacientes con enfermedades cardiacas, es necesario que expliques éstos y otros mitos del infarto para que no entren en pánico y tampoco lo confundan con otra enfermedad.