El comportamiento de las enfermedades gastrointestinales tiene una variación constante debido a los múltiples factores que intervienen: familia, alimentación, cultura, medio ambiente, todos estos factores implican cambios y el aumento de las enfermedades relacionadas. La población pediátrica, no es ajena a estos cambios. Es por ello que se observa un aumento de las enfermedades gastrointestinales: estreñimiento, síndrome de intestino irritable, trastornos funcionales y las alergias alimentarias, que en la actualidad se catalogan como un problema de salud pública en algunas áreas del país.[1]
Las variaciones se pueden deber a cambios culturales y a malas prácticas de salud, el consumo de alimentos industrializados, el uso indiscriminado de antibióticos, la edad de introducción a la alimentación en la infancia.
Aún es escasa la información sobre los cambios en las enfermedades gastrointestinales pediátricas, aunque hay artículos sobre algunas condiciones específicas.
Entre las enfermedades gastrointestinales más diagnosticadas en Colombia están: el estreñimiento funcional crónico, alergia alimentaria y trastornos de conducta alimentaria, enfermedad ácido-péptica, reflujo gastroesofágico, dolor abdominal recurrente, hemorragia de vías digestivas altas y diarrea prologada, fibrosis quística, entre otras.
Las enfermedades gastrointestinales, experimentan cambios a nivel nacional y mundial que se deben a diversos factores ambientales y culturales.
Otros factores que influyen en el comportamiento de las enfermedades gastrointestinales, pueden ser los cambios en el sistema de salud que permiten que la población sea valorada en diferentes centros y clasificada según su grado de complejidad y en el que influye de manera importante el estrato socioeconómico, que incide de manera directa en la disponibilidad de especialistas en gastroenterología pediátrica.
La alergia alimentaria y el estreñimiento funcional, fueron los principales diagnósticos gastrointestinales en los últimos años en nuestro país. El estreñimiento funcional crónico presenta una incidencia tan alta que se ha convertido en un problema de salud pública, al igual que la alergia alimentaria, que ocupa el segundo lugar de prevalencia en Colombia y con el que se presentan diferentes manifestaciones extra intestinales y gastrointestinales que pueden generar diferentes diagnósticos, por lo que el manejo terapéutico puede ser inadecuado y empeorar la afectación. [2]
Es fundamental que las organizaciones de salud a nivel local y mundial se enfoquen en realizar estudios de mayor envergadura con las que se pueda evaluar, clasificar y determinar el comportamiento de las enfermedades gastrointestinales, para detener su incremento en la población pediátrica, así como el impacto que tienen dichas enfermedades en el sistema de salud y en la sociedad
[1]Chey WD. The role of food in the functional gastrointestinal disorders: Introduction to a manuscript series. Am J Gastroenterology.
[2] Mora D, Daza W, Dadán S. Comportamiento epidemiológico de las enfermedades digestivas pediátricas en la Unidad de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica de Bogotá