Como médico emprendedor es seguro que en los últimos días, meses o años te hayas planteado una serie de metas que, quizás, aún no se hayan concretado, así que si cierras tus ojos para preguntarte qué fue lo que pasó y lo único que llega hasta ti es esa incómoda sensación de frustración, tómalo con calma, a todos nos pasa al menos una vez en la vida, pero lo importan es aprender a superarla y seguir adelante, para lo cual te proponemos seguir estos tres pasos:
1. Reconoce la frustración
A fin de lidiar con este malestar lo primero que hay que hacer es aprender a identificar cuándo estamos frustrados y si es por una situación laboral o doméstica, de modo que los problemas del trabajo se resuelvan en el trabo, y lo de casa en la intimidad del hogar.
Aunado a esto, pregúntate si en verdad vale la apena sentirte así y qué resultados obtendrías si actuaras de otra manera. El objetivo es que podamos acostumbrarnos a pensar con la cabeza fría.
2. Conoce tus limitaciones
En la misma medida en que es útil conocer nuestras cualidades, resulta importante determinar cuáles son nuestras limitantes, a fin de enfocarnos en aquello en que somos buenos hasta llegar a ser excelentes, y dejar de perder tiempo en sentir frustración por situaciones que bien pueden estar fuera de nuestro alcance.
Por ejemplo, como médico emprendedor puedes tener algún colaborador que sea realmente hábil trabajando la estrategia publicitaria de tu consultorio, clínica u hospital, de modo que aunque te encante encargarte de ella, suena lógico que sea él quien lo haga, de lo contrario solamente perderías tiempo y terminarías sintiendo frustración al no obtener los resultados que deseas, ¿no es cierto?
3. Haz ajustes
A veces puede sentirse frustración por percepciones erróneas. Por ello es importante hacer un alto para reflexionar y, de ser necesario, comentarlo con alguien de confianza.
Recuerda que el médico emprendedor es alguien fuerte, pero no infalible, así que no temas pedir consejo para lograr un panorama más completo con aquellos factores que son de tu interés y, consecuentemente, dispongas de herramientas para hacer ajustes a tus metas y estrategia de trabajo.
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