Durante la Primera Guerra Mundial los médicos militares implementaron un protocolo que permitía la clasificación de los pacientes según la gravedad de sus heridas o enfermedades. Esta técnica llamada Triage será aplicada por el IMSS de Quintana Roo.
Bajo este nuevo sistema, cuando una persona llegue a una unidad de salud, podría esperar no más de nueve minutos para ser valorado por un médico urgenciólogo, quien asignará al derechohabiente uno de los cinco colores de clasificación del esquema: rojo (situación muy grave), naranja (situación grave), amarillo (situación poco grave), verde (situación no grave) o azul (situación no urgente).
Enrique Leobardo Ureña Bogarín, coordinador auxiliar de gestión del IMSS en el estado de Quintana Roo, dijo que este nuevo proceso mejorará la atención a los pacientes mediante una valoración médica inmediata.
“Queremos que los recursos con los que contamos sean más eficientes. Para dicho propósito un médico especialista en urgencias podrá decidir el nivel de gravedad de cada paciente y el tipo de atención que necesita”, explicó Ureña Bogarín.
“Cada paciente sin excepción tendrá derecho a un tiempo estimado de atención. Cuando le sea asignado un color, el derechohabiente sabrá cuanto tendrá que esperar: de cero minutos a cuatro horas. En el caso de los pacientes que lleguen con hemorragias graves, dolor en el pecho o pérdida de la conciencia serán ingresados de inmediato ya que el color asignado para ellos es el rojo”.
Enrique Leobardo Ureña manifestó que debido a la alta demanda de servicio, el método Triage se empezó a utilizar en junio pasado.